Desde Ginebra

Las pequeñas economías y la OMC

Las pequeñas economías a menudo no están preparadas para competir con grandes multinacionales.

En el sistema global del comercio, la Organización Mundial del Comercio (OMC) es el pilar fundamental para la regulación del comercio internacional, promoviendo la liberalización comercial y la cooperación entre sus miembros.

Las pequeñas economías son aproximadamente cerca de cuarenta miembros de la OMC.

El Grupo Informal de las Pequeñas Economías y Vulnerables enfrenta desafíos que a menudo lo colocan en desventaja frente a las grandes potencias económicas. Este artículo trata de explorar el rol de las pequeñas economías en la OMC, los obstáculos que enfrentan y las oportunidades que pueden aprovechar dentro de este marco multilateral.

Las pequeñas economías son cerca de 40 miembros de la OMC que, según la definición, son países con una participación menor al 1% del comercio mundial de bienes y servicios. Esto incluye a muchas naciones, especialmente del Caribe, el Pacífico y África, así como de América Latina y Asia.

Estas economías suelen caracterizarse por mercados internos limitados, una limitada participación en el comercio mundial, alta dependencia de exportaciones de pocos productos básicos, vulnerabilidad a desastres naturales y una capacidad restringida para influir en las negociaciones internacionales.

Entre los desafíos de las pequeñas economías en la OMC está la falta de influencia en las negociaciones. A diferencia de los países desarrollados, las pequeñas economías tienen un peso limitado en las rondas de negociación de la OMC. Sus intereses pueden quedar relegados frente a las prioridades de los países más poderosos, lo que dificulta la defensa de políticas comerciales que protejan sus sectores vulnerables.

La capacidad institucional es limitada para implementar los acuerdos de la OMC, y requiere recursos técnicos y financieros que muchas pequeñas economías no poseen. Por ejemplo, adaptar legislaciones nacionales a normas comerciales internacionales o establecer sistemas de control de calidad para exportaciones puede ser un desafío significativo.

La dependencia de pocos productos primarios; por ejemplo, muchas pequeñas economías dependen de la exportación de bienes agrícolas o materias primas, lo que las hace vulnerables a la volatilidad de los precios internacionales. Además, enfrentan barreras comerciales como subsidios agrícolas en países desarrollados, que distorsionan la competencia.

A pesar de que la OMC promueve la apertura de mercados, las pequeñas economías a menudo no están preparadas para competir con grandes multinacionales. Esto puede llevar a la desaparición de industrias y aumentar la dependencia de importaciones.

El trato especial y diferenciado de la OMC reconoce las limitaciones de los países en desarrollo, otorgándoles un trato especial. Esto incluye plazos más largos para implementar acuerdos, exenciones temporales y asistencia técnica. Con la alianza de las pequeñas economías vulnerables, pueden aumentar su influencia y, con la conformación del Grupo Informal, negociar con mayor fuerza.

La resolución de disputas es el mecanismo de solución de diferencias de la OMC que permite a las pequeñas economías desafiar prácticas comerciales injustas de países más grandes. Aunque el proceso puede ser costoso y complejo, ha habido casos exitosos. Guatemala ha sido un miembro que ha usado frecuentemente ese organismo.

Las pequeñas economías enfrentan un camino lleno de desafíos dentro de la OMC, desde su limitada influencia en las negociaciones hasta las barreras estructurales de sus propios sistemas económicos.

Sin embargo, el marco multilateral de la OMC también ofrece herramientas y oportunidades para superar estas limitaciones, siempre que se implementen estrategias efectivas y se busque la cooperación internacional. En un mundo cada vez más interconectado, el fortalecimiento de las pequeñas economías no solo beneficia a estos países, sino que también contribuye a un sistema comercial global más equitativo y sostenible.

ESCRITO POR:

Eduardo Sperisen Yurt

Embajador. Representante permanente de Guatemala ante la OMC. Fue primer presidente y fundador de la Gremial de Exportadores de Productos No Tradicionales y presidente del Grupo de Negociación multilateral del Acuerdo sobre Facilitación del Comercio de la OMC.