Omar Treviño, alias “Z-42” , jefe máximo del debilitado cártel Los Zetas y uno de los capos más sanguinarios de México, fue detenido el miércoles en San Pedro Garza García, uno de los municipios más ricos del país situado en la zona metropolitana de Monterrey (norte) .
Un juez federal consignó el sábado a Treviño Morales por los delitos de lavado de dinero y portación de armas de uso exclusivo del ejército, añadió la fiscalía.
El capo, sobre quien pesa un pedido de extradición de Estados Unidos, fue enviado al penal del Altiplano, en el que se encuentran recluidos Joaquín “Chapo” Guzmán, quien al momento de su detención en febrero de 2014 era considerado el narcotraficante más poderoso de mundo, así como una larga lista de peligrosos narcotraficantes, secuestradores y homicidas.
El poderoso cártel de Sinaloa, que fue encabezado por el “Chapo” Guzmán hasta su detención, y los Zetas, un grupo criminal creado por exmilitares de élite desertores, han sido organizaciones claves en la cruenta violencia que vive México.
Treviño Morales, quien tomó el control de la organización tras la caída en julio de 2013 de su hermano Miguel Ángel, alias “Z-40”, fue detenido con otros seis hombres que también fueron consignados en diferentes penales, indicó la fiscalía en el comunicado.
Con decapitaciones y otras atrocidades, los Zetas impusieron el selló del terror en la llamada guerra del narcotráfico, iniciada en México en 2006 a raíz de la ofensiva militar contra el crimen organizado que ha dejado en el país más de 80 mil asesinatos y 22 mil desaparecidos.