Con esta frase, los líderes del sector privado nacional, integrado en el Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras, Cacif, pidieron a los empresarios e inversionistas no comprar los eurobonos que serán colocados para financiar proyectos gubernamentales hasta por US$700 millones.
Enrique Neutze, presidente del Cacif, dijo que su organización estaría dispuesta a exigir, si no prosperan los recursos legales contra la emisión, que se aplique la Ley contra el Lavado de Dinero, para que el Estado tenga la obligación de identificar con nombres y apellidos a los compradores de estos títulos.
Fomentarían corrupción
Según los empresarios, quienes adquieran los eurobonos fomentarán la corrupción, el lavado de dinero y el intento del oficialista Frente Republicano Guatemalteco de reelegirse.
El máximo líder del Cacif afirmó que aunque la Corte de Constitucionalidad, CC, no haya detenido el proceso de emisión de la deuda, ?el propietario de esos títulos corre el peligro de que el día de mañana los declaren inconstitucionales y pierda su inversión?.
Jorge Briz, presidente de la Cámara de Comercio de Guatemala, CCG, coincidió en que los recursos provenientes de la emisión de títulos públicos podrían ser mal utilizados.
Inversión atractiva
Desde la exención de impuestos hasta una tasa de cambio fija, serían los incentivos más atractivos para los inversionistas.
Pese a lo anterior, Briz dijo que esperan que haya empresarios conscientes de la realidad que está atravesando el país y el grave compromiso que adquirimos los guatemaltecos por ese endeudamiento?.
Federico Linares, director de la Corporación G&T Continental ,indicó que muchos bancos locales y off shores ya no solicitan más deuda soberana de Guatemala, porque han llegado al límite que les permite su portafolio de inversiones.
En su opinión, muchos bancos esperarían que terminen los procesos legales en la CC para evitar cualquier riesgo de que se declaren inconstitucionales o que el próximo gobierno diga que hay anomalías o vicios de procedimiento en la emisión.
El banquero dijo que una tasa de interés entre 10 y 11 por ciento anual compensaría para algunos inversionistas el riesgo del país, ante la caída de las tasas de interés en el mercado internacional.
Gobierno sigue firme
Eduardo Weymann, ministro de Finanzas Públicas, dijo a través de su oficina de prensa, que el Gobierno continúa firme en la colocación de los eurobonos y que esperan negociar US$150 millones este año y los US$550 millones restantes en el primer trimestre del 2003.
Insistió en que Guatemala tiene una de las economías más estables de Latinoamérica y que el apetito de los inversionistas por adquirir los títulos es positivo, debido al total cumplimiento del Acuerdo de ?Stand by? o de contingencia suscrito con el Fondo Monetario Internacional.
Beneficios: A prueba los principios
De cara a la solicitud efectuada ayer por Cacif, analistas piensan que los incentivos financieros de los eurobonos podrían ser más fuertes que el llamado a no comprarlos.
Desde la exención de impuestos hasta una tasa de cambio fija, podrían ser los incentivos más atractivos para los inversionistas que buscan rendimientos altos dentro de un mercado global deprimido, afirmaron.
Ramón Parellada, director del Centro de Estudios Económico-Sociales, Cees, dijo que aunque apoya la iniciativa del sector empresarial organizado, ?siempre habrá empresarios o inversionistas que se guíen por las señales del mercado de valores, y persigan su interés particular o el de su empresa?.
César García, presidente de Certeza Consulting, opinó que los inversionistas comprometidos con sus principios deben dejar de lado la rentabilidad y los beneficios, para apoyar la solicitud de Cacif.
?Los que se oponen a los eurobonos y sus consecuencias para el país, deberían apegarse a sus convicciones y renunciar a los beneficios que pueden obtener de estos instrumentos?, agregó.
