Continúo la exposicion de los principios que defienden los libertarios para quienes nos han preguntado por qué le pusimos el nombre ?Libertarios? al programa que conducimos semanalmente, en Guatevisión, Marta Yolanda Díaz-Durán y este servidor.

El programa se transmite los miércoles a las 9:00 de la noche y se repite los domingos a la misma hora.

Orden espontáneo: para que los individuos puedan sobrevivir y prosperar, se necesita una gran cantidad de orden en la sociedad.

Es fácil asumir que ese orden debe ser impuesto por una autoridad central. Sin embargo, los libertarios proponemos que el orden en una sociedad surge de manera espontánea, a través de las acciones de miles o millones de individuos que coordinan sus acciones con las de otros a manera de alcanzar sus objetivos, sin necesidad de una dirección centralizada.

Estado de Derecho: los libertarios proponemos una sociedad de libertad bajo la ley, en la cual los individuos son libres de perseguir sus propios fines, siempre y cuando respeten los iguales derechos de los demás.

Bajo esta perspectiva, el Estado de Derecho significa que los individuos son gobernados por reglas de aplicación general, abstractas, que se han desarrollado espontáneamente, no por órdenes arbitrarias; y que esas reglas deben proteger la libertad de los individuos para buscar la felicidad a su manera, no orientarlos a algún resultado particular.

Gobierno limitado: para proteger derechos y para proteger a los individuos del gobierno. Pero éste es una institución peligrosa. Los libertarios sentimos una gran antipatía por la concentración de poder, porque, como dijo Lord Acton: ?el poder tiende a corromper y el poder absoluto corrompe absolutamente?.

Por ello, proponemos la división y los límites al poder, especialmente al gubernamental, a través de una Constitución que enumere claramente y limite los poderes que los ciudadanos le delegan al gobierno (de allí nuestra inconformidad con la actual Constitución de Guatemala).

Mercados libres: para sobrevivir y prosperar, los individuos necesitan participar de la actividad económica.

El derecho a la propiedad implica el derecho a intercambiar la propiedad de mutuo acuerdo. El mercado libre es el sistema económico que surge de esas transacciones.

Los libertarios creemos que las personas serán más libres y prósperas mientras menos intervenga el gobierno en las decisiones económicas.

La virtud de la producción: los libertarios defendemos el derecho de las personas productivas a quedarse con lo que ganan, en contra de burócratas y políticos, quienes gustosamente confiscarían sus ganancias para transferirlas a quienes no producen nada.

Armonía natural de intereses: los libertarios creemos que existe una armonía natural de intereses entre las personas pacíficas y productivas en una sociedad justa.

Los planes individuales de una persona -sean éstos obtener un empleo, iniciar un negocio, comprar una casa, etc.-, pueden entrar en conflicto con los planes de otros, así que el mercado hace que muchos tengamos que cambiar nuestros planes.

Pero todos prosperamos de la operación del mercado libre, y no existen, necesariamente, conflictos entre los agricultores y los comerciantes, industriales e importadores.

Sólo cuando el Gobierno empieza a conceder privilegios con base en la presión política es que nos encontramos con conflictos de interés de grupos, que son forzados a organizarse y pelear con otros grupos por obtener un pedazo del poder político.

Paz: los libertarios siempre han luchado en contra de las guerras.

Entendemos que éstas llevan muerte y destrucción a gran escala, deshacen la vida familiar y económica, y le dan más poder a los gobernantes (lo que quizá explique por qué los gobernantes no siempre comparten el sentimiento popular por la paz).

¿Es usted libertario?