Alta Verapaz

Niñas y jóvenes qeqchíes practican y promueven el taekuondo

Un grupo de niñas y jovencitas qeqchíes de Cobán,  Alta Verapaz, rompen esquemas porque además de que practican taekuondo, lo hacen vestidas con su  traje típico y no el uniforme clásico de ese deporte.

Para la práctica de taekuondo, las niñas y señoritas utilizan licra bajo el corte. (Foto Prensa Libre: Eduardo Sam).

Para la práctica de taekuondo, las niñas y señoritas utilizan licra bajo el corte. (Foto Prensa Libre: Eduardo Sam).

COBÁN.- Las características propias del traje q’eqchi’ —plegado, ligero y versátil— les facilita utilizarlo en el entrenamiento y práctica de ese arte marcial, por lo que los instructores de la Asociación de Taekuondo en este departamento les permite utilizarlo y   preparan exhibiciones en diferentes municipios para el 2015, con el objetivo de promover esa disciplina entre más niñas y jóvenes.

En la actualidad hay 15 integrantes del grupo. Los hermanos Dany Adolfo y Rudy Coy, instructores de la referida  entidad y de origen q’eqchi’, buscan despertar el entusiasmo y motivar a las jóvenes para que practiquen con el traje típico, ya que es parte de su identidad y el taekuondo sería más popular.

Considera que el no tener que despojarse de su traje típico para ponerse el reglamentario para ese deporte  permitirá que niñas de otras comunidades lo practiquen, en especial las de escasos recursos, pues no tendrían que invertir en la compra del vestuario deportivo. Con esto  también se evita  la posible oposición de comunidades  al uso del uniforme.

“No cualquiera se aventura a hacer lo que estamos haciendo. Tratamos de  inculcarles a las nuevas generaciones nuestros conocimientos, involucrando a las etnias,  diciendo no al racismo y soñando con que alguna señorita de escasos recursos llegue a ser campeona departamental o nacional”, manifestó Rudy Coy.

Una de las integrantes del grupo, Leidy Daniela Coy Chen, comentó que ahora no es un pretexto practicar un deporte porque se utiliza traje típico, aparte de una licra debajo del corte.

Yaritza Nefertari Paredes Rodríguez, de 11 años, refirió: “No había pensado entrenar con corte, pero sí se puede. El corte no estorba y es más cómodo”, aseguró.

 Mónica Patricia Cu Coy, otra participante,  dijo: “Pensé que era vergonzoso y que entrenar con traje típico era difícil, pero es cómodo y tiene  un valor extra, que es el de la identidad. En mi casa me dicen que siga adelante, y en la escuela me preguntan sobre cómo entrenar”.

 

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