Durante su participación en el Foro de las Naciones Unidas sobre Empresas y Derechos Humanos 2025, realizado en Ginebra, Suiza, Rodrigo Barbosa, presidente y director general de Aura Minerals, condujo un panel que fue bien recibido por representantes de gobiernos, sociedad civil y organismos internacionales. En su intervención, destacó que Guatemala necesita avanzar hacia un modelo de gestión minera más humano, más cercano a las personas y menos agresivo, enfocado en el diálogo, el respeto a los derechos humanos y el desarrollo sostenible de las comunidades.

A través de Era Dorada, Aura Minerals prioriza la contratación de talento local y desarrolla programas de formación técnica para fortalecer las habilidades de los colaboradores de la región. Asimismo, promueve la protección de recursos naturales y la generación de beneficios comunitarios mediante proyectos en salud, educación, infraestructura y apoyo al desarrollo de pequeños y medianos emprendedores locales.

En todos los lugares en los que opera Aura Minerals, impulsa su Cultura "Aura 360", basada en colaboradores, en primer lugar, comunidades y respeto al medio ambiente.  

Para conocer detalles sobre el proyecto Era Dorada en Guatemala, dialogamos con Rodrigo Barbosa:

Sabemos que Aura Minerals prioriza a las personas y a los colaboradores, ¿cómo garantiza la empresa este compromiso? 

Creemos que los derechos humanos comienzan poniendo a las personas en primer lugar. No existe minería sostenible si no hay entendimiento y aprobación de la mayoría de la comunidad.

En Guatemala hemos optado por abrir el diálogo y comunicar con claridad qué es la minería y qué pretendemos hacer en el país. También generamos oportunidades para que líderes comunitarios y autoridades locales conozcan de primera mano cómo funciona una operación minera y cuáles son los valores que aportamos al medio ambiente y a la comunidad. A través de visitas a la unidad Borborema, recientemente construida e iniciada en operaciones (en Brasil), han tenido la oportunidad de conocer y comprender de forma práctica el modelo operativo de Aura.

La minería es mucho más que entregar proyectos a la comunidad. Se trata de generar valor. En Brasil, por ejemplo, hemos logrado mejorar la calidad del agua de los ríos. Recogemos aguas residuales que antes eran vertidas directamente al río sin tratamiento, tratamos el 100% de las mismas y las incorporamos a la operación del proyecto Borborema, contribuyendo a la preservación del medio ambiente y al bienestar de la sociedad, reforzando nuestro compromiso con la sostenibilidad y la comunidad.

En Guatemala encontramos condiciones parecidas a Brasil, baja infraestructura, problemas de salud y dificultades derivadas del tratamiento inadecuado de aguas residuales. Nuestro compromiso es hacer las cosas de manera diferente y aportar valor real para mejorar la calidad de vida de las personas. Por eso, trabajamos con gobiernos locales y comunidades para invertir en tecnología de última generación orientada al saneamiento y al acceso a agua potable. Podemos garantizar agua potable para consumo humano y, a través de una gestión conjunta con la comunidad y el gobierno, asegurar agua potable para la comunidad. 

Las comunidades pueden encontrar en la minería trabajo y desarrollo, ¿cómo promueven la transparencia y la ética en sus operaciones?

Mantenemos una comunicación transparente con todos nuestros grupos de interés. Realizamos visitas que llamamos “mina abierta”, donde mostramos toda la operación y explicamos cómo y por qué actuamos. Esta es una práctica fundamental que da transparencia, que ya se está implementado en el proyecto Era Dorada.

Además, sostenemos un diálogo directo y constante con las comunidades, informando sobre las operaciones y los proyectos, y escuchando activamente sus inquietudes. En el proyecto Era Dorada contamos con más de 853 horas de diálogo en mesas de desarrollo con nueve comunidades, afectadas directa e indirectamente, lo que ha resultado en 22 proyectos comunitarios.

También contamos con  canales de denuncia que son administrados por terceros, lo que garantiza el anonimato. No sabemos quién presenta la denuncia, pero aseguramos que todas son evaluadas y atendidas. He participado personalmente en el comité que analiza estos casos y, gracias a este mecanismo, hemos identificado situaciones que nos permitieron corregir prácticas internas.

Durante años se pensó que la minería y el medio ambiente no podían coexistir, ¿cómo se logra este equilibrio?

Todas nuestras decisiones siguen un patrón claro: analizar el impacto en la comunidad y en el medio ambiente. Muchas decisiones están relacionadas con la operación y la planta, pero siempre considerando el tratamiento posterior y la restauración de las áreas intervenidas, incluso desde la fase inicial, como el corte de árboles, que plantamos más de lo que talamos.

En cuanto al consumo de agua, tratamos aguas residuales de la ciudad que son contaminadas por la misma población. Posteriormente, mejoramos su calidad y suministramos agua potable a comunidades que históricamente han sufrido enfermedades por el acceso a agua de mala calidad.

Gracias a esta estrategia, hoy somos reconocidos como una de las Empresas más Socialmente Responsables en Honduras, México y Brasil.

¿Cómo asegura Aura Minerals el cumplimiento de sus políticas de Derechos Humanos y buenas prácticas operativas? ¿Qué procesos de auditoría y verificación interna implementa para lograrlo?

Contamos con personas especializadas dentro de la empresa responsables de difundir toda esta información. No existe un área aislada, toda la empresa está comprometida con los derechos humanos.

En Brasil, por ejemplo, hemos obtenido resultados positivos en el tratamiento de agua. En Honduras, desarrollamos nuevos proyectos agrícolas con cultivos de alta calidad en áreas que fueron minadas en el pasado, para que las comunidades absorban la tecnología y conocimiento y cuenten con nuevas fuentes de ingresos, más allá de la minería, dejando un legado positivo para la comunidad.

Estamos viviendo un mundo tecnológicamente avanzado, ¿qué papel juega la inteligencia artificial en la minería responsable?

La inteligencia artificial va a cambiar mucho la forma en que trabajamos, pero es solo una herramienta. Antes que la tecnología, necesitamos personas íntegras, alineadas y con una comprensión clara de los derechos humanos y del impacto ambiental. Con ese enfoque, la tecnología nos ayuda a mejorar, a fiscalizarnos y analizar qué estamos haciendo bien y qué áreas requieren mayor atención.

Aura Minerales se caracteriza por implementar formatos de seguridad, ¿cómo garantiza la seguridad de sus colaboradores y operaciones en la mina?

La seguridad es nuestra prioridad. Debemos garantizar que todas las personas que trabajan con nosotros regresen a casa de la misma forma en que llegaron. Para ello utilizamos herramientas tecnológicas, monitoreo por radar, drones e inteligencia artificial, asegurando operaciones cada vez más seguras.

Formo parte del Comité de Seguridad de la empresa, que se reúne constantemente y cuenta con auditorías de terceros para garantizar que cumplimos con los más altos estándares de protección.

Hoy somos un referente en seguridad dentro del sector, aunque seguimos aprendiendo y mejorando continuamente.

¿Cúal es su mensaje para gobiernos, sociedad civil y organismos internacionales?

Ante las Naciones Unidas, reafirmamos nuestro compromiso de hacer las cosas de manera diferente en Guatemala, demostrando que es posible una minería sostenible con beneficios para las comunidades, para la empresa, para los gobiernos y para la naturaleza.

Queremos que el proyecto en Guatemala, Era Dorada, se convierta en una referencia mundial en excelencia, no solo evitando impactos negativos, sino generando un impacto positivo y duradero en las comunidades y en la protección del medio ambiente. Trabajaremos con convicción y responsabilidad para lograrlo.