Los caninos pueden escapar por diferentes razones, la principal es el comportamiento propio de su raza, indica José Daniel López, zootecnista de Arca de Noé. “Hay razas de rastreo, búsqueda y casería, que no siguen órdenes sino se dejan llevar por alcanzar a la presa. Por ejemplo, un beagle sale corriendo al sentir el olor de un gato, y lo hace por el simpe hecho de seguirlo”, explica.

La raza también es importante al considerar las instalaciones en donde estará el perro y, de ser necesario, deberán hacerse adaptaciones. Si un husky siberiano ve que se abre el portón, saldrá corriendo por instinto, ya que es una raza agresiva o territorial, lo mejor sería que en ese momento esté en un patio trasero. Otro caso podría ser un terrier, por su temperamento actúa a la defensiva ante cualquier otro perro, por lo que no sería buena idea dejarle mucho acceso a las ventanas.

La falta de entrenamiento para caminar adecuadamente en la calle podría ser otra causa de escape. “Son los perros que siempre van a tirar de la correa, por lo que hay que inhibirles esta conducta”, agrega el zootecnista.

Si tienes una hembra, debes tener especial cuidado durante su periodo reproductivo; pues ni ella ni los machos podrán reprimir sus instintos. De acuerdo con López, cuando un perro sienta el olor de una perrita en brama, irá tras ella. En el caso de una hembra en celo, responderá al instinto reproductivo de perpetuar su especie.

Por otra parte, hay perros que a falta de satisfacer necesidades básicas como la alimentación, se sentirán motivados a escapar.

¿Cómo reaccionar si el perro se escapa?

Un error común al ver que el perro se escapa es llamarlo a gritos. “Eso no ayuda porque puede creer que está en peligro o es un regaño y seguirá huyendo, lo mejor es llamarlo como se hace habitualmente y llevar un juguete u objeto que le sea de interés”, recomienda López.

En caso la mascota esté en un espacio nuevo e intente escapar, no la castigues al regresar ya que eso aumentará su temor o ansiedad, tampoco la acaricies, ya que podría reforzar su comportamiento, lo mejor es entrenarla para evitar esa conducta.

¿Cómo entrenar a tu perro para que no se escape?

Dedica unos cinco a 10 minutos a entrenar a tu perro para que responda ante cualquier intento de escape. Para ello busca un lugar abierto, sepárate un poco y llámalo pronunciando su nombre.

Acarícialo y puedes darle premios cada vez que responda positivamente. Aprovecha los momentos de juego para hacer una pausa y repetir el ejercicio de alejarte y llamarlo por su nombre. Poco a poco suéltalo, déjalo correr y vuelve a llamarlo.

Para evitar que tu perro se escape al entrar o salir del automóvil, López sugiere subirlo al carro apagado y jugar dentro para que comprenda que es un espacio seguro. Un buen entrenamiento puede evitar que tu perro escape y propiciar a que responda a tu llamado.

Noé dice…

Cuando tu perro escape, en lugar de gritar, atráelo mostrándole juguetes u objetos que son de su propiedad para que los identifique y regrese sin temor.