Enfermedades frecuentes en el verano

Con la estación más calurosa del año a la vuelta de la esquina, vale la pena tomar en cuenta los consejos para evitar enfermedades.

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No es casualidad que el aumento de la temperatura derive en enfermedades. Las condiciones extremas del clima tienen un impacto directo en el sistema del ser humano y a veces, uno más grande en el de las mascotas.

 

Sin embargo, no es necesario esperar hasta sentir las temperaturas elevarse para tomar medidas y evitar enfermedades. Un chequeo veterinario constante también ayudará a prevenir cualquier enfermedad que se empiece a desarrollar incluso antes del verano. Para empezar, mantener a las mascotas vacunadas y desparasitadas podría ahorrar la mitad de la lucha contras las enfermedades que se describen a continuación:

 

  1. Otitits: el calor hace que los perros busquen más el agua o que sus dueños los bañen más seguido. Esta acumulación de humedad provoca un aumento de bacterias lo que deriva en otitis. Esta inflamación se hace evidente cuando el perro se rasca las orejas más de lo normal, necesita sacudir la cabeza por esta molestia y lo hace constantemente y sus oídos no solo huelen mal, también segregan más cera de lo normal.

 

Prevención de la otitis: realizarle una limpieza cada 15 días, en especial si tiene orejas caídas o grandes, pues estas razas son más propensas a sufrir otitis. Consulta con tu veterinario de confianza sobre la aplicación de un limpiador ótico cada 4 o 5 días, en especial durante el verano, para controlar las bacterias y levaduras.

  1. Dermatitis y alergias en la piel: se trata de una reacción de la piel del animal por la presencia de bacterias infecciosas. La provocan los cambios de clima, temperatura y alimentación que se activan con las altas temperaturas. Se manifiesta en presencia de caspa, granos y pérdida de pelo. El perro responde al rascarse y morderse las zonas infectadas para calmar la molestia, pero esto solo empeora la situación. Las razas más propensas son las de pelo largo y las de pelo blanco.

Prevención de la dermatitis: consulta con un veterinario de confianza sobre los mejores métodos para prevenir la dermatitis y alergias en tu mascota.

 

  1. Parásitos externos: el calor del verano “alborota” a las pulgas, garrapatas y mosquitos.

Prevención de los parásitos externos: las pipetas son eficientes, pero lo son más los collares para parásitos externos. Para mantener el control, revisa su pelaje con frecuencia para detectar algún parasito que haya atravesado la barrera protectora que constituye su melena. Para otros métodos preventivos, consulta con el veterinario de confianza.

  1. Problemas digestivos: causados principalmente por la negligencia de los dueños de compartirles restos de su comida. La mayoría de los ingredientes no les caen bien al estómago y les produce diarreas y otros problemas digestivos como vómitos, pérdida de apetito e incluso estreñimiento.

Prevención de los problemas digestivos: evita darle a tu mascota los restos de tu comida. Incluso si salen de viaje juntos, empaca una buena ración de su concentrado o comida especial para que alcance para todo el viaje y algunos treats o galletas especiales para consentirlo. Cuando quieras cambiar su dieta, consulta con anticipación a un especialista para que te asesore sobre la manera correcta de hacerlo.

 

  1. Cistitis: las hembras se ven más afectadas por este tipo de infecciones ya que sus conductos urinarios son más cortos. Esta infección se da cuando las bacterias ascienden desde el exterior hacia la vejiga a través de las vías urinarias y en algunos casos pueden afectar incluso los riñones. Las mascotas afectadas con cistitis orinan con mayor frecuencia y pueden mostrar sangre o un color turbio en la orina.

Prevención de la cistitis: consulta con un especialista sobre la manera correcta de prevenir la cistitis. Esta infección es muy dolorosa por lo que puede que tu perro se queje severamente al orinar. Si lo ves también beber u orinar con frecuencia, consulta de inmediato a tu veterinario de confianza.

Noé dice…

Mantén suficiente agua fresca y a la mano para tu mascota. No la saques a pasear a medio día o en las horas cuando el sol pega más fuerte, pues podría quemar sus patitas por el calor del asfalto.

 

Fuente: Muy Interesante, Muy Mascotas. Dana Hospital Veterinario.

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