Deporte Nacional

Historia de Gerber Blanco, el vallista que sueña con Río 2016

El guatemalteco Gerber Patricio Blanco sueña con estar en unos Juegos Olímpicos y tendrá la oportunidad de buscar la marca en los 400 metros con vallas en Florida, Estados Unidos.

Gerber Blanco buscará la próxima semana la marca de acceso en los 400 metros con vallas. (Foto Prensa Libre: Fernando López)

Gerber Blanco buscará la próxima semana la marca de acceso en los 400 metros con vallas. (Foto Prensa Libre: Fernando López)

El atleta, originario de Puerto Barrios, necesita terminar la prueba con un tiempo de 49 segundos y 40 centésimas para acceder a las justas olímpicas de Río 2016. Hasta el momento su mejor tiempo es de 50 segundos y 38 centésimas.

El guatemalteco, de 22 años, busca ser el primer atleta nacional en competir a nivel olímpico en una especialidad de pista, luego de la presencia de en Sydney 2000 en los relevos 4×100 del equipo integrado por los hermanos José y Óscar Meneses, José Tinoco y Rolando Blanco.

“Mi mejor marca es la que obtuve en los Juegos de Veracruz, que fue de 50.38; para el Mundial me están pidiendo 49.50. Se escucha que es una diferencia pequeña, pero no lo es; sin embargo, creo que estoy haciendo un buen trabajo y considero que puedo lograrla”, asegura Gerber.

Con la certeza de que lo mejor está por venir en su carrera como deportista, el atleta sueña con poder inspirar a los jóvenes guatemaltecos para que se involucren en el deporte para formar un mejor país y poder hacer de su vida algo positivo, lejos de cualquier vicio.

“Un deportista más, un delincuente menos. Me gustaría animarlos a todos a que busquen hacer deporte, el que más les guste. Es algo que va a cambiar sus vidas para bien”, asevera el deportista nacional.

Sacrificio

“En el 2004 mi familia se desintegró porque mi papá se fue a Lívingston y me quedé con mis hermanos en Puerto Barrios. Yo tenía 12 años. Si no fuera por el deporte no sé en dónde estaría, porque ya estaba saliéndome del carril. No me gustaba estudiar y solo andaba en la calle y me estaba metiendo en el alcohol”, recuerda Gerber, y afirma que el atletismo llegó justo a tiempo en su vida.

Los siguientes tres años fueron de total aprendizaje en una experiencia que describe como “fantástica” y que lo llevó a poner su nombre entre los principales exponentes de los 400 metros vallas a escala nacional.

“Me dediqué a entrenar mucho y a dar mi máximo esfuerzo. Mi entrenador peruano me ayudó mucho e inmediatamente empecé a tener buenos resultados. Cabal, al año que empecé a competir, fui al Campeonato Centroamericano Juvenil en Nicaragua y lo gané”, comenta.

Después de dar ese paso importante, Gerber ganó en confianza y empezó a dominar a escala nacional, con lo que superó a Carlos Andrade, quien en ese entonces era su principal contrincante.

 

ESCRITO POR:

Fernando López R.

Periodista de Prensa Libre, especializado en deportes con más de 20 años de experiencia como reportero y editor. Reconocido por coberturas como los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, Pekín 2008 y Londres 2012.