Con 50 goles en dos temporadas y llevando a la espalda el mítico ’10’ que vistieron antes Michel Platini, Roberto Baggio o Alessandro del Piero, Tévez se ha convertido en el ídolo de la afición turinesa y el jugador más temido por los rivales.

Ganador de la Copa Libertadores en 2003 con Boca Juniors y de la Liga de Campeones en 2008 con el Manchester United, además de campeón del mundo de clubes con ambos equipos, Tevez tiene la ocasión de coronar su palmarés a los 31 años, después de atravesar un periodo negro, de septiembre de 2011 al verano de 2013, cuando fichó por la Juventus.

El ‘Apache’ estuvo incluso apartado del Manchester City por un conflicto con su entonces entrenador Roberto Mancini, después de negarse a entrar en la cancha en un partido contra el Bayern Múnich, el 27 de septiembre de 2011.

Después de un largo enojo, finalmente pidió excusas y al cabo de cinco meses volvió a retomar su carrera, pero por entonces ya estaba a la sombra de su compatriota Sergio ‘Kun’ Agüero, la nueva estrella del City.

Este episodio manchó su reputación, pero Tévez se marchó a Turín para levantar su carrera. Tras un primer año destacable (19 goles), el argentino ha demostrado toda su calidad en la presente campaña.

Decisivo en el ataque

“Tévez ha hecho una temporada extraordinaria”, ha repetido su entrenador Massimiliano Allegri antes de la final.

Liberado por Allegri, el argentino se ha revelado decisivo en el ataque blanquinegro, lo que le ha llevado incluso a ser repescado por el nuevo jefe de la Albiceleste, Gerardo Martino, que le ha incluido en la lista definitiva para disputar la Copa América-2015.

Tras la decepción de haberse quedado fuera del grupo que afrontó el Mundial de Brasil, por el entonces seleccionador Alejandro Sabella, Tévez sueña con convertirse en una de las piezas clave para conquistar el título continental, tras las finales perdidas en 2004 y 2007.

En la cancha, el excapitán del City se ha convertido en la pieza angular de la Juventus. “Carlos nos ha hecho dar un salto cualitativo cuando llegó”, señaló su compañero Claudio Marchisio.

El centrocampista, además, desmiente la mala reputación del jugador que se crió en el barrio de Fuerte Apache.

“Nunca ha creado problemas, enseguida se puso a disposición del grupo y se convirtió en una referencia para el equipo”, justifica Marchisio.

Su papel en el equipo es destacado por todos sus compañeros de manera unánime. El lateral francés Patrice Evra, que llegó el pasado verano a Turín procedente del United, reveló: “En verano hablé con Tévez y el arquero Gianluigi Buffon y sentí en ellos una determinación increíble”.

“Admiré su enorme personalidad”, añadió el defensa galo.

Paul Pogba, uno de los principales asistentes del ‘Apache’, le describe como un luchador, lo da siempre todo, incluso en los entrenamientos, y no se relaja nunca, esa es su fuerza.

Desde hace unas semanas, el ‘Apache’ parece haber bajado un poco el nivel exhibido toda la temporada. No brilló en el partido de vuelta de la semifinal de Champions contra el Real Madrid y el pasado sábado falló un penal contra el Hellas Verona (2-2) en el último partido del campeonato italiano.

Pero Marchisio mantiene su confianza en el argentino: “Carlos es un jugador fundamental, esperamos que vuelva a serlo el sábado”.