Chicharito, del Bayern Leverkusen, se fracturó una mano en un accidente casero, y Oribe Peralta, del América, se fracturó la nariz en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016, por lo que no estarán disponibles.
El seleccionador de México apostó a una nueva generación de goleadores que ha brillado en las recientes jornadas del Apertura 2016 mexicano, como son Martín Barragán, del Atlas, y Ángel Zaldívar, de las Chivas.
Osorio recurrió a la plana mayor de sus europeos: el guardameta Guillermo Ochoa, en el Granada español; a los defensas Héctor Moreno (PSV Eindhoven), Diego Reyes y Miguel Layún (Porto) y los volantes Andrés Guardado (PSV Eindhoven) y Héctor Herrera (Porto).
Raúl Jiménez (Benfica) y Jesús Corona (Porto) completan a los foráneos que el colombiano ha tomado en cuenta para visitar a El Salvador el 2 de septiembre, y recibir a Honduras en el estadio Azteca cuatro días después.
México ya aseguró su clasificación al hexagonal final en el grupo que forma con El Salvador, Honduras y Canadá.
En el hexagonal final, la Concacaf repartirá tres lugares directos para el Mundial de Rusia 2018 y el cuarto lugar se medirá en una repesca a ida y vuelta contra el quinto de Asia.
Hoy más que nunca, es momento de sudar la camiseta.
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— Selección Nacional (@miseleccionmx) August 25, 2016
