En la rueda de prensa previa al partido, el técnico de la Oranje, cuyo juego ha decaído según avanzaba el torneo, afirmó hoy que su sueño era “ser los número uno”, aunque reconoció que no eran el “mejor equipo” del Mundial.
“Todos estamos decepcionados”, dijo sobre el estado anímico del equipo.
“Antes del torneo dije que éramos el equipo más difícil de vencer y por eso es una vergüenza que no hayamos llegado a la final”, añadió el técnico, que está a punto de cerrar su etapa al frente de la selección con destino a Inglaterra, donde dirigirá al Manchester United.
Sin embargo, lejos de un discurso pesimista y apoyándose en su afirmación de que caer en la tanda de penaltis no es perder, el técnico hizo hincapié en que aún les queda un sueño por cumplir: regresar a Holanda invictos.
“Nunca ha habido una selección holandesa que haya regresado a casa invicta” de un Mundial, comentó Van Gaal.
También afirmó que hubiera preferido perder por 7-1, como le ocurrió a Brasil con Alemania, que en los penaltis con Argentina.
“Es mejor perder 7-1, porque de esa manera pierdes claramente; pero nosotros no perdimos, nosotros sólo no nos clasificamos por los penaltis”, sostuvo.
El seleccionador no quiso hablar de Brasil, pero comentó que su once inicial está aún por decidir y que, de hecho, tampoco les ha dicho nada todavía a sus pupilos a fin de que todos estén “centrados en el rival”.
Además, Van Gaal señaló que decidirá la alineación “dependiendo del estado de forma” en que vea a sus jugadores.
Ante preguntas de los periodistas, Van Gaal sí se refirió a su reciente cruce de declaraciones con el seleccionador brasileño, Luiz Felipe Scolari, quien hace unos días se mostró indignado con unas afirmaciones del técnico holandés en las que decía que Brasil jugaba con ventaja.
“Me ceñiré a los hechos”, dijo. “Los hechos son que Brasil empezó primero” y “que jugó su último partido un día antes que nosotros; Scolari debería pensar en ello”, añadió el ex entrenador de equipos como el FC Barcelona o el Ajax.
Preguntado por la decepcionante actuación del capitán del equipo, Robin Van Persie, a lo largo del torneo, Van Gaal rompió una lanza en favor de su jugador y recordó que “dos meses antes de unirse al grupo estaba lesionado”.
El jugador Dirk Kuyt, que acompañó a Van Gaal durante la rueda de prensa, también defendió a la estrella holandesa: “Esta ha sido la mejor selección en la que he jugado y Van Persie era el líder, era el capitán”.
Cuestionado sobre el estado anímico del equipo, Kuyt declaró que todos están “afectados” y que, aun hoy, se sienten “incómodos” con su participación en el Mundial.
Tras la rueda de prensa, todo el equipo saltó al césped del Mané Garrincha para realizar su último entrenamiento antes del partido, que, como es usual, sólo fue abierto a la prensa durante unos quince minutos.