Zidane, sentar a un intocable o contentar a Isco

Si alguien puede tomarla es el francés, como ha demostrado en su predicamento con las estrellas del vestuario y su mano izquierda para hacerles aceptar las rotaciones. Cristiano Ronaldo ha descansado más que nunca este curso. Y ya es menos noticia cuando en encuentros ante rivales asequibles se queda en la grada y la segunda línea entra en escena.

Pero hay un caso especial. Un futbolista que por rendimiento merece ser titular pero no hay espacio para él. Un jugador que medita su futuro y espera un guiño de Zidane en el carrusel de partidos grandes que encadena el Real Madrid en abril. Isco lo comenzó siendo suplente ante el Atlético de Madrid pese a ser reservado en Butarque. En Múnich necesita más.

El rendimiento de la BBC se ha rebajado ostensiblemente respecto a otras temporadas. El único que está cerca de su nivel es Karim Benzema y en el derbi madrileño no mantuvo su acierto rematador de las últimas fechas, perdonando dos claras ocasiones ante Oblak que luego añoró el Real Madrid en los últimos minutos por desperdiciar la sentencia del encuentro.

Cristiano Ronaldo ha rebajado sus números goleadores pero su presencia intimida a rivales, aporta siempre el máximo esfuerzo, llegadas a portería rival, remates y últimamente más asistencias. El bajón más preocupante es el de Gareth Bale, que no ha vuelto a ser el jugador decisivo que era antes de su lesión.

Cuando Zidane dijo que la BBC era insustituible no había debate por ninguna de sus figuras. Posteriormente se generó en torno a la de Benzema. Ahora los focos se desvían a Bale, con un análisis de rendimiento que le sitúa muy por debajo de las aportaciones de Isco.

Con Keylor Navas, Carvajal, si supera sus molestias de gemelo, Sergio Ramos, Nacho, Marcelo, Casemiro, Kroos, Modric, Cristiano y Benzema con el puesto asegurado, la duda por despejar es Bale o Isco.

Sentar a un intocable o contentar al andaluz. Pedir mayor esfuerzo defensivo al galés, con el riesgo de que el equipo se parta, o aumentar el equilibrio con un medio más y apostar por la velocidad del contragolpe como conquistó el Allianz el Real Madrid en su última visita. El debate está en el madridismo.