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Febrero, sinónimo de tragedia en Municipal

Activos en sus carreras y como jugadores de Municipal, Rolando Marroquín, Jhony Aldana y Dany Ortiz, fallecieron en el mes del amor.

Febrero se ha encargado de marcar algunos de los momentos más trágicos para  Municipal, debido a la pérdida de jugadores que se habían ganado el respeto de la institución.

La lamentable noticia que recibió el pasado miércoles el volante guatemalteco Marco Pablo Pappa, por el fallecimiento de su madre, cuando disputaba el encuentro de la séptima fecha contra Guastatoya, solo alargó el listado de los acontecimientos sucedidos en febrero en el campamento rojo.

El 20 de febrero de 1994 falleció en un accidente automovilístico el guardameta nacional Rolando Fidencio Marroquín Barrientos,  cuando a sus 22 años atravesaba uno de  los  mejores momentos en su carrera deportiva.

“Es lamentable lo sucedido. Los jugadores están con la moral baja porque lo querían mucho. Será complicado levantarles el ánimo”, dijo el entonces presidente rojo Ernesto Villa.

Marroquín Barrientos murió debido a los múltiples golpes que recibió en la cabeza, luego de que saliera expulsado del vehículo, al ser embestido por un taxi sin luces, en la entrada hacia Villa Nueva.

Adiós, goleador

Ocho años después, el 15 de febrero del 2002, el delantero guatemalteco Jhony Aldana perdió la vida, después de haber sufrido un golpe en la cabeza, cuatro días antes, con una portería en un entrenamiento en el estadio del Trébol.

Aldana,  21, y oriundo del barrio la Democracia,  Guastatoya,  El Progreso,  tuvo una contusión en la parte posterior del cráneo. Además, sufrió un trauma craneoencefálico y el hueso fracturado le hacía compresión al cerebro.

“Jhony era una persona alegre, callada, y que trabajaba con muchas ilusiones de jugar en la Liga Nacional”, expresó Julio Girón, capitán rojo en ese momento.

Josué Dany Ortíz era el portero titular de Municipal cuando falleció en 2004, tenía 6 años en la Liga Nacional.

Nuevo golpe

El 29 de febrero, el día del cumpleaños de Jhony Aldana, el destino una vez más jugó en contra de los escarlatas, luego de que en el clásico 211, el guardameta coatepecano Josué Dany Ortiz murió, al haber recibido un fuerte impacto por parte del delantero crema Mario Rodríguez, cuando ambos disputaban el balón.

“Con el ultrasonido confirmé la sospecha de un taponamiento cardíaco, y solicité el equipo para hacer una pericardiocentesis —extracción de líquido—”, explicó uno de los médicos que trató a Dany.

A pesar de haber drenado 100 centímetros de sangre del pericardio, Ortiz sufrió un paro cardíaco que le ocasionó la muerte de forma instantánea.

Febrero siempre estará marcado por el dolor para Municipal.

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