El alcalde y los directivos de la liga Segunda División no se han pronunciado hasta ahora. Tampoco han respondido las llamadas para conocer su versión sobre lo ocurrido.
El juego entre San Juan FC vs. Chiquimulilla se llevó a cabo el pasado sábado 1 de mayo a las 20 horas en el estadio San Juan Bautista de San Juan La Laguna, Sololá. El resultado final fue 0-0. Una supuesta decisión arbitral habría provocado la ira de los dirigentes y los aficionados. Ahora todo se resolverá el próximo 9 de mayo a las 11:30 horas en el estadio Los Conacastes de Chiquimulilla, Santa Rosa.
De acuerdo con el informe arbitral, firmado por Corado, el alcalde Yojcom llegó al camerino con prepotencia para amenazarlos “que de ahí no saldrían vivos y no va ser problema de nosotros”.
Después de eso, según el reporte, llegaron para cancelarles los honorarios y viáticos. “Esperamos porque no había seguridad de la Policía Nacional Civil para retirarnos del estadio”.
La PNC, según el acta, se retiró cuando terminó el partido y solo quedaron agentes de la Policía Municipal de Tránsito (PMT).
“Consideramos que no era seguridad para el equipo arbitral. Unos minutos después llegó el vicepresidente de la liga Segunda División, Sergio Estuardo Cuá Cojoc, quién nos indicó que ya estaba coordinada la salida”.
Según Corado, para salir del estadio a la calle principal debían pasar por un callejón angosto y oscuro. “Cuando empezamos a salir como a las 23 horas (el juego había terminado a las 22) con cinco elementos de la PMT junto con el vicepresidente de la liga Segunda División se adelantaron para ver lo de nuestra salida, pero al fondo se encontraba un grupo de personas que nos estaban esperando para agredimos”.
Lo dramático de todo, según explica el central, fue que en ese momento el presidente de la liga Segunda División, Augusto Recinos, caminaba en el callejón para ingresar en el estadio y les dijo: “Buen retorno, bendiciones. Y al comisario Alex García le comentó que iba a quedarse platicando con el alcalde dentro del estadio”.
Luego el vicepresidente y dos elementos de la PMT se adelantaron para observar cómo estaba el ambiente en la calle. Según Corado uno de los tres PMT que se quedaron atrás “nos alumbraron con focos para indicarle a las personas afuera que el equipo arbitral se dirigía a la calle”.
“Fue donde decidimos quedarnos parados y al observar a la gente que estaba esperándonos nos percatamos que corrieron hacia nosotros. En ese momento decidimos regresar a la puerta principal del estadio la cual fue cerrada inmediatamente por personas no identificadas y no pudimos hacerlo. Quedamos totalmente expuestos a una brutal emboscada”.
El equipo arbitral, según consta en el documento que firmó el central, el comisario y el asistente uno, Edson García, lograron escapar, “pero no así el asistente dos, Carlos Castilla y mi persona quienes fuimos agredidos brutalmente a patadas, puñetazos y con envases de vidrio, entre otros”.
El asistente dos sufrió heridas en las manos y el brazo derecho. El central fue agredido en la espalda y en el rostro. El equipo arbitral se resguardó en una casa que estaba a la par del estadio. “La familia de la propiedad nos dio refugio mientras llegaba la PNC”.
Entre los agresores, además del edil, hay concejales de San Juan La Laguna, quienes al ver lo que ocurrió intentaron sobornar al equipo de árbitros para que no reportaron los hechos que ocurrieron.
