¿Cómo se ve a Guatemala desde la OIA?

El sector tiene un lugar ganado, que seguirá siendo un país exportador de azúcar y ahora se enfrenta a situaciones del mercado europeo que han provocado una baja en el precio.

¿Cómo han reaccionado?

Ya están viendo otros mercados como África Occidental, que va en crecimiento.

Este es un nicho de oportunidad interesantante.

¿A qué mercados?

Están muy activos Senegal, Costa de Marfil y Ghana. La industria local ya está rastreando ese mercado, porque esos países producen entre el 62% a 68% del cacao a escala mundial. Hay oportunidades para que Guatemala entre con los pies para adelante.

¿Qué esta pasando en Europa?

Ese mercado esta liberizando su régimen azucarero, se eliminaron los precios de referencia, las cuotas de producción, lo que va a provocar es un incremento en su área cultivada de su producción regional. Ya no son subsidios, sino apoyos internos. A la expectativa de una sobreproducción, los precios han disminuido.

¿Es factor precio?

Exacto, y eso no solo afectará a Guatemala, pero golpeará duró a los países de África, el Caribe y del Pacifíco. La mayoría de colonias tenían garantizado el acceso del producto y a un precio favorable, ahora, se la están viendo difícil.

¿Cómo esta el consumo a nivel mundial?

Hay una baja sustancial y para esta cosecha 2017-2018 proyectamos una reducción como producto de las modas.

Ahora esperamos cerrar en 1.24%, cuando el promedio era de 2%.

¿En tema de precios?

Estamos proyectando un excedente de producción para 2018. Brasil, que mueve el 58% del comercio mundial, y se tomaron medidas para fabricar azúcar para exportación y eso mantendrá precios bajos.

¿Qué amenazas hay?

Primero, cambios del patrón en medio ambiente, y la otra, es que hay varios gobiernos a escala mundial que implementan acciones para reducir el consumo de azúcar, —para reducir la obesidad— sin contar con las pruebas cientificas.

Explicó que en el caso de México, en el 2014 se le aplicó un impuesto a las gaseosas. En 2015 hubo reducción de consumo de azúcar, pero se duplicó en el 2017.