Economía

Atraso de devolución de crédito fiscal pone en aprietos a contribuyentes

Proponen caminos para aminorar efectos por el retraso de hasta un año en el reintegro del crédito fiscal a contribuyentes.

El siniestro ocurrido en la oficina de Grandes y Medianos contribuyentes la semana pasada, puso al descubierto una serie de carencias que enfrenta la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) sobre todo lo relacionado al resguardo de la información contable de los contribuyentes.

La advertencia de que la reconstrucción de las auditorías podría atrasar un año, va a generar un impacto a los contribuyentes, según la visión de un empresario y un investigador, quienes fijaron postura al respecto.

Lo más recomendable es hacer cambios al sistema para la devolución del crédito fiscal, así como en el resguardo de la documentación por parte del administrador tributario.

“Hay que reformar todo el sistema”

Juan Carlos Tefel, presidente de la Cámara de Industria de Guatemala (CIG), afirmó que los contribuyentes que habían solicitado las auditorías para la devolución del crédito fiscal y cuyos expedientes pudieron haberse dañado por el incendio en la SAT, tienen incertidumbre por el atraso que esto representará en la acreditación.

El representante industrial dijo que es necesario hacer reformas para agilizar la entrega y evitar estos inconvenientes.

¿Cómo interpretan el atraso de hasta un año para devolución del crédito fiscal?
Es algo terrible, porque es dinero de los contribuyentes. Nos parece que es una situación inaceptable, que, por una negligencia, intención o independientemente de la causa del siniestro se castigue al tributante que cumple con sus obligaciones.

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Si sucede lo contrario, la SAT aplicaría todo el peso contra el contribuyente.

¿Cuál es el problema de fondo?
Que es una obligación de la SAT realizar pronto las auditorías para la devolución del crédito fiscal, o todas aquellas relacionadas con los contribuyentes.

El crédito fiscal es un dinero de las personas jurídicas e individuales que tienen el derecho de compensación.

¿Cuál es la observancia?
Que la SAT durante años crea que es un favor el que le está haciendo a las empresas, y no lo es.

Hay responsabilidades legales. —Que haya—  expedientes que pudieron haber sufrido un daño, —junto a— un atraso de un año es totalmente irresponsable.

¿Cuáles serían las soluciones más inmediatas?
Como CIG hemos realizado varias propuestas. Por ejemplo, se habla de la factura electrónica, que es ahí donde creemos que debemos llegar y estamos de acuerdo con el superintendente Abel Cruz. Pero para ello estamos a varios años de lograrlo.

Para mientras, varias empresas tendrán problemas de liquidez porque no contarán con recursos de capital de trabajo.
Eso es claro y es muy similar que un cliente no pague a una empresa en cinco años. En ese ínterin presentamos la propuesta para que regrese el silencio administrativo positivo —a favor del contribuyente—.

¿Algún otro elemento?
Que se ponga un plazo para la realización de las auditorías para la devolución del crédito fiscal.

Al mismo tiempo, que la devolución del crédito fiscal sea automática y que las auditorías por parte de la SAT sean posteriores y aleatorias.

Este modelo sucede en otros países como Chile, donde si se encuentra algún ajuste se realiza la defensa o bien se liquida.

¿Qué puede pasar a los agremiados que tienen en espera la devolución?
Ahora estamos a la espera de la información y se ha solicitado, porque no se ha notificado a todos los afectados.
Observamos que hay una copia de un expediente —rescatada del incendio— de una industria farmacéutica que es socia de la CIG, pero estamos esperando la información.

Tenemos varios asociados que se han acercado a colaborar, ya que no cuentan con los datos de si sus expedientes están dentro del inventario de los dañados o no.

“La gestión debe ser más segura”

Maynor Cabrera, de la Fundación Económica para el Desarrollo (Fedes), dijo que el atraso en la devolución del crédito fiscal para los contribuyentes es un golpe financiero en momentos en que existe una desaceleración económica.

El economista afirmó que las empresas que esperaban contar con estos recursos para este ejercicio deberán ajustar sus presupuestos.

¿Qué significa este atraso para los contribuyentes?
En general, es un costo financiero importante, porque los contribuyentes que tienen el derecho no tendrán los recursos por un año.

Es un impacto directo a los contribuyentes que estaban en estos procesos y de los cuales los expedientes se pudieron haber perdido por el incendio.

¿Qué sentimiento hay en los contribuyentes?
Es lamentable para los contribuyentes que han cumplido con sus procesos y obligaciones tributarias, porque sus casos se atrasarán para recibir el beneficio por un año.

Pero, por otro lado, hay contribuyentes que estaban realizando mal sus procesos y es una licencia para la impunidad.

Fue un evento fortuito y hay aspectos negativos para ambos lados: es decir, contribuyentes que hacen bien las cosas y otros que las hacen mal.

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¿Cuál sería el mecanismo de solución inmediata?
Hay dos temas puntuales. El primero es de cómo la SAT encuentra la forma de la devolución más expedita y afine los criterios para el desarrollo de las auditorías.

El sistema para la devolución del crédito fiscal debe mejorar.

Lo segundo es que la SAT debe contar con un sistema mucho más seguro de gestión de casos.

¿Como por ejemplo?
El atraso de un año para la devolución impactará a los contribuyentes y se deberá contar con un instrumento para gestionar los expedientes y contar con los resguardos suficientes para cualquier eventualidad.

Un manejo negativo de los expedientes o extravío si no se cuenta con una copia es algo muy delicado por el cuidado de la información. Por ello, se debe mantener el respaldo de la documentación.

¿Qué se debe mejorar a raíz de este siniestro?
La SAT tiene que cambiar todo el sistema para la devolución del crédito fiscal, así como afinar los criterios de qué contribuyentes salen seleccionados en esta auditoría.

Las auditorías deben desarrollarse con un sistema de gestión de casos, con respaldo de la información y que no obstaculice los procesos en las siguientes etapas, tanto de ajustes encontrados como la devolución del crédito.

Una institución como la SAT debe contar con el respaldo en el manejo del riesgo para estos casos.

¿Qué lecciones deja esta situación?
La quema de los expedientes significa que la SAT no cuenta con las medidas adecuadas para el manejo de sus oficinas.

Por otro lado, tampoco hay medidas para resguardar la documentación y hay algunas situaciones que se deben tratar.

El atraso de un año para la devolución es muy alto, y se debe recortar ese período.

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ESCRITO POR:

Urias Gamarro

Periodista especializado en macroeconomía, finanzas públicas e infraestructura, con 20 años de experiencia en medios radiales, impresos y digitales.

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