Economía

Emilio Azcárraga deja la dirección general de Televisa

El empresario Emilio Azcárraga dejará de ser director general de Televisa después de dos décadas, aunque se mantendrá como presidente ejecutivo del consejo de administración, informó hoy el mayor consorcio de medios en español.

La empresa mexicana anunció el nombramiento de Bernardo Gómez y de Alfonso de Angoitia como co-presidentes de Grupo Televisa a partir del 1 de enero.

Azcárraga, de 49 años, “continuará al frente del desarrollo de la estrategia de largo plazo de la compañía”, además de que seguirá teniendo responsabilidad directa de la división de futbol de Grupo Televisa, propietario del club América, se anunció en un comunicado.

“Nuestra industria está pasando por una transformación muy importante, que nos presenta grandes retos, pero oportunidades aún mayores”, afirmó Azcárraga.

La televisora está en proceso de cambios en un entorno de negocios complicado por una mayor competencia desde otras plataformas, dificultad de atraer hacia la televisión abierta al público joven e incluso problemas de imagen.

Gómez y de Angoitia son los actuales vicepresidentes ejecutivos del Grupo. Ambos participaron en la reestructuración del capital y de las operaciones de Televisa en la era de Azcárraga, que comenzó en 1997, después de la muerte de su padre, Emilio Azcárraga Milmo.

El empresario de 49 años deja su puesto en un momento crítico en el que su compañía lucha por recapturar la atención del público que se siente más atraído por los contenidos en plataformas de streaming como Netflix y la consecuente pérdida de ventas a anunciantes que esto conlleva.

Solo en la primera mitad de 2017, las ganancias comerciales de Televisa cayeron un 8.9% en comparación con el mismo periodo del año anterior.

Televisa es el mayor productor de contenido televisivo en español del mundo.  Sin embargo, en lo que va del año ha tenido cambios importantes en su mesa directiva para impulsar su alianza con Univision Communications Inc.

La salida de Azcárraga Jean marca el fin de una era en la televisión mexicana pues significa la salida de la familia fundadora del puesto de dirección de Televisa, un periodo que inició con Emilio Azcárraga Vidaurreta en los años 50.

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