En ese sentido, Francisco Morales, delegado de la Procuraduría de Derechos Humanos en Suchitepéquez confirmó que llegaron a un acuerdo con los vecinos de la Aldea El Progreso y liberaron 30 camiones que estaban detenidos.
El acuerdo se logró porque el gobierno firmó un compromiso para darle mantenimiento al tramo que preocupaba a los vecinos de la Aldea El Progreso y será la gobernadora de Suchitepéquez Leonor Toledo quien entregue el acuerdo a los pobladores.
El miércoles por la noche el transporte pesado que se encontraba detenido en la ruta salió de esta vía alterna, pero no pueden volver a transitar por el lugar.
Según testimonios de pilotos los comunitarios únicamente permiten el paso de vehículos livianos y camiones menor a 10 toneladas. Por lo tanto, la única ruta alterna disponible para el transporte pesado es la de Quetzaltenango e indican que en El Nuevo Palmar se evidencia una fila hasta de cuatro carriles por el congestionamiento de transporte pesado.
Las tres comunidades que aún bloquean la ruta alterna son:
- San José, El Ídolo
- San José, La Máquina
- Aldea El Progreso
Esta situación se dió luego que las autoridades habilitaron estas vías alternas, como una respuesta al hundimiento que se dio en el kilómetro 166, ruta a suroccidente, y mantener con ello, la agilidad del comercio con el país vecino México, el cual representa en exportaciones US$450 millones anuales.
Pérdidas de productos perecederos
Productores de la región están solicitando a las autoridades que agilicen la apertura de esa vía como el caso de la Asociación de agricultores de Palajunoj quienes enviaron una carta al Gobernador departamental de Retalhuleu donde informan de sus producciones agrícolas, incumplimiento de compromisos comerciales y por ende en su economía.
Bernardo Roehrs, director corporativo de BANASA informó que por el lugar transitan 200 contenedores diarios de banano, esta situación también afecta a los pequeños productores, a quienes se les pudrió el producto.
El ejecutivo dijo que se han perdido órdenes y contratos con clientes porque no les llegó el producto, pérdidas materiales, incremento de costos en el transporte, desgaste de los pilotos del transporte.
Roehrs dijo que aunque el presidente Jimmy Morales, reconoció que el colapso de una parte del puente se debió a la falta de mantenimiento del mismo, se necesitan mejores condiciones de la infraestructura del país y un equipo de reacción inmediata para que las carreteras no colapsen y en caso de crisis, poder responder de manera efectiva y con inmediatez para no paralizar a todo un sector económico.
“La respuesta de las entidades correspondientes ha sido nula. No se han acercado a entrevistar a los pilotos, a verificar en qué condiciones se encuentran. Muchos llevan horas esperando poder pasar, sin poder llegar a sus casas, a algunos les han rotos los vidrios de los camiones, otros han sido amenazados y los comunitarios cobran por pasar en sus caminos”, enfatizó Roehrs.
Roehrs solicitó la intervención de las autoridades para que se habilite una ruta alterna y que las comunidades dejen pasar los contenedores. “No hay cómo entrar en razón a los comunitarios. El estado debe de asumir esa responsabilidad, no las empresas”, enfatizó.
La Cámara del Agro de Guatemala también se pronunció por medio de un comunicado y confirman que empresas productoras de palma, banano, azúcar, entre otros, reportan pérdidas y contabilizan más de 600 contenedores parados con diferentes tipos de productos en su mayoría perecederos.
Gustavo Rivas, secretario de la Asociación Nacional de Productores de Granos Básicos (Anagrab) resaltó que el daño en el puente entre Cuyotenango y Mazatenango impide el paso de compradores de maíz y la afluencia de compradores bajó por la preferencia de comprar maíz de contrabando más barato, señaló el productor.
Flujo de carga
- El movimiento es de 250 contenedores diarios y apróximadamente mil los que vienen desde México pagando importante cantidad en impuestos.
- Se estima que cada furgón lleva entre 18 mil y 20 kilos de diferentes productos, entre ellos, materias primas que está afectando principalmente a productores de todo tamaño de empresas.
Apoyo empresarial
La Cámara del Agro informó que varias empresas productoras de diferentes sectores como palma, banano, azúcar, entre otras, han prestado colaboración con mano de obra, maquinaria y recursos económicos para suplir la función del Estado para atender esta emergencia y reparar lo más pronto posible el puente Guachipilín en el kilómetro 166 de la carretera CA-2 suroccidente.
Bernardo Roehrs, director corporativo de BANASA afirmó que la empresa contribuyó con maquinaria, (dos máquinas retro para reparar las bases del puente) asesoría técnica, trabajo de soldadura, mano de obra y materiales para la reparación del puente.
“Hemos colaborado con encauzar el río Camella, apuntalar el puente, es decir, dar estabilidad al mismo a través de gaviones, relleno de agujeros en la parte inferior y vigas que permiten su rigidez para la reparación, y se donaron contenedores que servirán como base de soporte para la instalación del puente Bailey”, dijo Roehrs.