Recientemente, Green Development ha otorgado al asesor financiero el reconocimiento Green Footprint Carbono Positivo, debido a los proyectos realizados en el año 2022. Con esto BAC se ha convertido en la primera entidad bancaria en Guatemala en obtener este sello que constata que la organización acreditada ha cumplido con los requisitos de recopilación de información y desarrollo de inventario de GEI, estimación de Huella de Carbono y cuantificación de proyectos de reducción y mitigación.

“El reconocimiento Green Footprint Carbono Positivo, evidencia nuestro compromiso por reimaginar la banca en Guatemala, además, de promover el posicionamiento de prácticas empresariales responsables para la construcción de un futuro más sostenible en el país. En línea con nuestra Estrategia Neto Positivo, como empresa, nos esforzamos por dar más al planeta de lo que recibimos en nuestras operaciones. Esto significa que buscamos hacer negocios que no solo brinden beneficios económicos, sino que también aporten bienestar al planeta y a las personas”, expresó Eric Campos, Country Manager de BAC Guatemala.

El proceso de evaluación realizado por Green Development consiste en el análisis de la medición, reducción y compensación de las emisiones de GEI, siguiendo los lineamientos de la Norma ISO 14064:2006. Esta norma es ampliamente reconocida por instituciones de renombre mundial como el Instituto Mundial de Investigación, el Consejo Mundial de Comercio para el Desarrollo Sostenible y la Convención Marco de Naciones Unidas para el Cambio Climático.

Green Development dio a conocer que la medición de la generación de emisiones de GEI realizada para la operación de BAC en Guatemala, incluyendo todas sus sucursales y edificios, fue de 3,600 toneladas de CO2. Considerando las emisiones de alcance uno, que son directas y producidas por quema de combustible, las de alcance dos, que son indirectas y generadas por la electricidad consumida, y las de alcance tres, que son indirectas y bajo control de un externo.

BAC ha implementado desde el 2020, diversos proyectos que tuvieron un impacto significativo el año pasado, logrando reducir su Huella de Carbono en aproximadamente 45.5 toneladas de CO2. Entre estos proyectos se incluyen la optimización de sistemas de aire acondicionado, la instalación de paneles solares, la automatización de sistemas de iluminación y la contratación de fuentes de energía renovable.

El asesor financiero decidió ir más allá y optó por la compra voluntaria de créditos de carbono de 3,800 toneladas de CO2. Esta acción contribuye a la descarbonización, mediante la inversión en proyectos de generación de energías limpias en la región. Es importante destacar que un crédito de carbono es una unidad que representa una tonelada de CO2 absorbida o evitada en la atmósfera.