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Gobierno a examen: Programas sociales tuvieron poco avance y falta de certeza sobre beneficiarios
Problemas legales, administrativos y discurso anticorrupción, retrasaron beneficios, dicen analistas.

A un año del inicio del gobierno de Bernardo Arévalo, los programas sociales han logrado una visibilidad limitada y no avanzaron debido a diversos factores, entre los que se incluyen desafíos legales que enfrenta el partido Movimiento Semilla, cuestiones administrativas y la confrontación entre el mandatario Bernardo Arévalo y la fiscal General, Consuelo Porras, según señalan los analistas.
El Ministerio de Desarrollo Social (Mides) gestiona iniciativas como la Bolsa Social, los Comedores Sociales, la Beca Social, y otros programas como Mano a Mano, que trabaja en colaboración con diferentes instituciones para reducir los índices de desnutrición. Sin embargo, a pesar de los avances positivos, expertos coinciden en que existen obstáculos que impiden que estos programas avancen a una cobertura nacional efectiva.
Ricardo Barreno, analista independiente, sostiene que los programas sociales que tienen que ver con educación, vivienda y salud comenzaron a implementarse de forma tardía en el segundo semestre de 2024, por complicaciones de carácter administrativo para levantar las bases de compras e identificar grupos necesitados.
"Se enfocaron en un discurso orientado al combate de la corrupción y en acciones para la transparencia, y eso marcó un retraso en la ejecución de los programas", afirmó.
Para Barreno, las discusiones presupuestarias marcaron la ejecución en los programas, pues se evidenció la dificultad de la ejecución.
"Son programas importantes pero con ejecución tardía", señaló Barreno.
El analista dijo que "lo coyuntural determinó mucho las discusiones de estabilidad del partido Semilla y las discusiones legislativas moldearon la capacidad de atender las necesidades de la población".
Barreno concluye en que la ejecución presupuestaria del Mides fue mejor en el primer año de Alejandro Giammattei y en gobiernos anteriores, aunque considera que eso tampoco determina la calidad en la ejecución del gasto.
"Este gobierno intenta generar mayor calidad de gasto, pero sin pleno conocimiento de administración pública", puntualizó.
Comedores
Los comedores sociales comenzaron a funcionar en el 2008, pero es uno de los programas más criticados por hallazgos irregulares de la Contraloría General de Cuentas, que determinó que la ubicación de 46 de los 79 comedores sociales que funcionaban en 2023 no era adecuada.
La información oficial dice que los comedores deben habilitarse en lugares donde exista vulnerabilidad en inseguridad alimentaria, donde la desnutrición sea aguda y mayor a un 5%. También en lugares específicos que estén cerca de hospitales, centros educativos, estaciones de buses, y albergues habilitados en casos de desastres.
Desde el 2017, Banquetes de Guatemala ha sido el proveedor de dichos comedores. Solo la actual administración le adjudicó 22 eventos en 2024. La actual administración prevé abrir otros 21 comedores para los siguientes meses.
En 2024 se pagaron Q207 millones para comprar los alimentos que se distribuyen en los comedores sociales, según el Sistema Integrado de Administración Financiera (Sicoin), del Ministerio de Finanzas.
Menor inversión
A decir de Virginia Pinto, analista de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asíes), en el primer año de gobierno del presidente Bernardo Arévalo, el Mides presentó un incremento de gastos de funcionamiento del 1% en comparación con el 2023.
"En cuanto a inversión, en el 2023 fue de un 18% y en el 2024 fue de un 17%", acotó.
Pinto dice que el primer año del actual gobierno fue para "acomodar las piezas", lo que les consumió tiempo y puede ser la consecuencia de que los programas sociales sean "menos tangibles".
"La narrativa contra la corrupción les ha tomado mucho tiempo, pero la gente lo que quiere son resultados que puedan ver, este año deberían tener resultados más visibles. La parte de infraestructura es lo que más reclama la población", dijo Pinto.
"Continuaron con los programas pero no se ve impacto significativo, a diferencia de lo fue en otros años", enfatizó.
Agregó que habría que ver el alcance de los programas, su eficacia, si se obtienen los resultados esperados, y si los beneficiarios tuvieron un avance económico y social.
"Se supone que son programas de apoyo y no de mantenimiento. La idea es que en algún momento el beneficiario o las familias salgan de la situación en que se encuentran", opinó.
En 2024, el Mides recibió Q2 mi 538 millones 137 mil 885 de presupuesto, y ejecutó 2 mil 403 millones 908 mil 205. Por lo que gastaron el 94.7% del presupuesto asignado.
Adulto Mayor
El Mides tiene a su cargo el programa de Desarrollo Temporal Integral, el cual beneficia a exmilitares con Q1 mil mensuales, durante tres años, a cambio de que participen en programas de reforestación.
En julio de 2024, el Congreso aprobó una reforma para que se abriera una nueva fase de inscripciones en el programa. De acuerdo con los reportes en la página web del Ministerio de Desarrollo Social (Mides), el padrón de beneficiarios es de 44 mil 100 y con la nueva incorporación el Mides sumarán 80 mil exmilitares dentro del programa.
Sin impacto
Para Rubén Hidalgo, analista del Instituto Centroamericano de Estudios Políticos, no hubo avances o disminución de los problemas que se atienden con los programas.
"La falta de experiencia, los conflictos entre el Ejecutivo y el Ministerio Público, conflictos legales del partido y la falta de un liderazgo consolidado en el Congreso, repercutió en esta percepción de que los programas no aterrizaran en algunos departamentos", señaló.
"Con el gobierno de Giammattei es difícil comparar, porque en el primer año de su gobierno entró la pandemia a Guatemala, y eso le abrió una ventana de oportunidad al señor para congraciarse con el país", dijo Hidalgo.
Uno de las situaciones que viene desde gobiernos anteriores, según el analista, es la falta de credibilidad de los listados de beneficiarios, al afirmar que en esta administración también se han encontrado beneficiarios "fantasmas".
"Se debe garantizar que los beneficiarios existan y que estén necesitados de los programas", recomendó.
Nutrición
En junio del 2023 el Mides implementó el Bono nutricional, que consiste en una transferencia monetaria de Q500 mensuales que recibirán las familias de niños identificados con desnutrición aguda severa.
En diciembre último, el Mides entregó la tarjeta número 50 mil del Programa Bolsa Social en la aldea El Carrizal, San Raymundo, Guatemala, según las autoridades de gobierno, para duplicar el padrón de beneficiarios del Programa Bolsa Social.
Dicho programa consiste en entregar una Transferencia Monetaria Condicionada de Q250 mensuales para la compra exclusiva de productos de la canasta básica alimentaria a personas de escasos recursos económicos.
El Mides detalla que a la fecha ha atendido a 25 mil 610 familias en 17 municipios del departamento de Guatemala.
Postura
El ministro de Desarrollo Social, Abelardo Pinto, refirió que como parte de los logros de la institución se autorizó un incremento salarial para los trabajadores, al argumentar que en 12 años no se había hecho una revisión presupuestaria en ese tema.
Como parte de los programas dijo que están por lanzar el registro único de beneficiarios.
“En el registro social de hogares recibimos siete municipios por parte del sistema de Naciones Unidas, nosotros hemos levantado 17 municipios y la meta para este año es de 50”, explicó.
Pinto ve como uno de los logros haber “ordenado los programas”, al sostener que se estandarizaron las transferencias monetarias condicionadas, se amplió la cobertura de beneficiarios, la cobertura geográfica y se hizo una focalización de los proyectos a las áreas más vulnerables.
“El programa Mano a Mano se estableció en los primeros 7 municipios y se tiene una meta de llegar a 25 municipios para este año”, aseguró.
Añadió que los dos logros más importantes son la declaratoria del primer municipio libre del piso de tierra y la comunidad ejemplar.
Según Pinto, se entregaron más de 120 mil bonos únicos a para familias en situación de pobreza y pobreza extrema.
“En el programa Bolsa Social que funciona en 17 municipios de Guatemala se duplicó el número de beneficiarios, de 25 mil pasó a 50 mil”, puntualizó.