Esquivel explicó que este año han sido repatriados 15 guatemaltecos que fueron condenados en otros países, para que terminen su pena en el país.

En una entrevista en el Diario Extra, de Costa Rica, Tórtola García le contó a los reporteros previo a ser traído al país:  “Una semana después de ser detenido murió mi esposa en Guatemala”.

Él fue capturado en diciembre de 2012 cuando trasnportaba 25 kilos (unas 55 libras), de cocaína en el furgón que conducía. Su ruta era Panamá, Costa Rica y Guatemala, pero fue capturado en Peñas Blancas, Costa Rica, donde fue condenado.

“A mis hijos los cuida mi familia.  Hablo con ellos de vez en cuando, y solo puedo hacerlo durante seis minutos”, comentó al rotativo en Costa Rica.

En lo que va del año, la Policía de Control de Drogas de Costa Rica contabiliza 485 kilos de cocaína decomisados en la frontera norte y 12 personas detenidas, cuatro de ellos guatemaltecos, cuatro colombianos, dos costarricenses, un panameño y un hondureño.  

Al parecer Tórtola García era un simple conductor y su camino terminó en Peñas Blancas. Desde su celda en Liberia, le dijo a los reporteros del referido diario que lo único que deseaba era ser extraditado y cumplir su pena en Guatemala. “De esa forma voy a estar cerca de mi familia”, les dijo.

Accesibilidad

El Instituto Costarricense sobre Drogas (ICD), en su informe “Plan Nacional sobre drogas, legitimación de capitales y financiamiento al terrorismo”, calificó a Peñas Blancas como un punto estratégico para los agentes antidrogas nacionales y nicaragüenses.  

“La conformación geográfica de la frontera con Nicaragua —dice el informe—ofrece a las autoridades costarricenses y nicaragüenses una ventaja importante. El único paso necesario e ineludible para un vehículo pesado que se traslada de sur a norte del continente americano se ubica en el puesto fronterizo de Peñas Blancas.

Fuera de este paso, el resto de las fronteras es permeable por múltiples pasos, señala el documento, de acuerdo con la información del Diario Extra.  

Carlos Rodríguez, viceministro de Justicia de Costa Rica, explicó al referido matutino que el Centro de Atención Integral de Liberia lleva a cabo un estudio de cada caso para asignar un ámbito a los privados de libertad y los pilotos de furgones no son la excepción.  

“En este caso particular del tráfico internacional de drogas, hay una serie de condiciones para evaluar. Ellos son personas que fueron utilizadas para un trabajo, y no representan ningún tipo de liderazgo de las organizaciones”, señaló Rodríguez. 

Antecedente

El primer cargamento que las autoridades de Costa Rica decomisaron este año en Peñas Blancas fue de 68 kilos (unas 149 libras)  de coca en los tanques de combustible de un cabezal, el cual transportaba rollos de papel.
El detenido fue un guatemalteco con los apellidos Castellanas Interiano.

Celso Gamboa, ministro de Seguridad de Costa Rica, manifestó al referido diario que es válido argumentar que pueda existir una mayor organización de transportistas para el trasiego de droga, pero aún prevalecen los conductores que trabajan para cualquiera.  

Incluso, añadió Gamboa, por lo general no conocen ni a proveedores y tampoco al comprador final, simplemente hacen el traslado del producto.