Los agentes de la Subdirección General de Análisis e Información Antinarcótica de la Policía Nacional Civil, apoyados por el Ejército y fiscales, erradicaron las plantaciones de amapola en una extensión de poco más de 65 hectáreas, con un valor de 735,92 millones de quetzales (94,22 millones de dólares) .
Durante los operativos contra los cultivos de amapola no se registraron capturas.
El pasado lunes cuatro policías resultaron levemente heridos cuando decenas de campesinos pobres de Tajumulco atacaron con piedras, palos y bombas incendiarias al contingente policial que se dirigía hacia Ixchiguán para erradicación de plantaciones de amapola.
Según las autoridades, narcotraficantes mexicanos obligan a los campesinos que habitan las zonas fronterizas a dedicar sus tierras al cultivo de amapola y marihuana, que una vez cosechadas son trasladadas a México en donde la procesan para luego enviarla a Estados Unidos.
El año pasado, según las autoridades, fueron destruidas plantaciones de amapola cultivadas en más de 2.500 hectáreas, las que fueron valoradas en unos US$3.200 millones.
En diciembre pasado, el presidente Otto Pérez Molina, anunció que su Gobierno “explora” la posibilidad de regular la siembra de la amapola en este país con fines medicinales, como una de las “nuevas alternativas” de su Administración para hacer frente al problema de las drogas.
ACAN-EFE
