En un correo electrónico enviado al portal británico The Guardian, Tim Clark comentó que estuvo detrás de la campaña proselitista de Manuel Baldizón –en el 2011–, junto a su compañero Ron Nehrin.

Clark y Nehrin fueron pagados por Baldizón para que le asesoraran en la imagen para que fuera candidato a la presidencia, por lo que los estadounidenses pasaron seis semanas en Guatemala para conocer a la población y llevar a cabo una estrategia efectiva.

“Nehrin me preguntó si podría ayudarle, ya que él tenía el contacto, él me dijo: Clark, me sería muy útil tu ayuda aquí, ¿qué es lo que piensas?”, relató Clark.

De acuerdo con el testimonio. “Teníamos guardaespaldas, interpretes. Viajamos en camionetas negras y polarizadas, y la parte trasera de los vehículos estaba lleno de armas semiautomáticas. Fue una experiencia interesante. Me alegro de haber salido con vida”, agregó.

Encuentro con Baldizón

Clark y Nehring se reunieron con Baldizón para aconsejarle qué hacer con su campaña proselitista, fue ahí cuando viajaron a los mítines con el excandidato, sin embargo la incomodidad de Clark era que el trabajo que realizaban era pagado por intereses puramente corporativos que no formaban parte de la campaña.

“En algunas reuniones sentía que era objeto de miradas cuando escuchaba que decía: 'los expertos americanos ya están aquí”, djio Clark.

“Nuestro trabajo fue aconsejar para su campaña. Fue posible y creció sus intereses políticos”.

Opinión de un experto

Un grupo que investiga el crimen organizado en América, reportó que Baldizón se rehúso a compartir la identidad de las personas que “donaron” dinero para su campaña.

El profesor y experto en ciencias políticas, Michael Allison, dijo que Baldizón tendría que dar a conocer las personas que financiaron su campaña. “Como candidato en el 2011, Baldizón prometió que transmitiría por televisión las ejecuciones. Prometió de todo a las personas”, agregó Allison.

En otra parte de la información, Clark dice se le ofreció trabajar en la campaña de Jimmy Morales y que él se negó. “Pero fue divertido. Guatemala eligió un cómico como su presidente”.