Internacional

El mundo condena nuevo desafío de Pionyang; reunión urgente en la ONU 

La Unión Europea (UE) y la Organización para el Tratado del Atlántico Norte (OTAN) condenaron el reciente lanzamiento de un misil por parte de Corea del Norte, en tanto que las potencias pidieron una reunión urgente en la ONU. 

Nuevo lanzamiento de un misil intercontinental por parte de Kim Jong-Un preocupa a la comunidad internacional. (Foto Prensa Libre: EFE)

Nuevo lanzamiento de un misil intercontinental por parte de Kim Jong-Un preocupa a la comunidad internacional. (Foto Prensa Libre: EFE)

“Esta es una nueva violación de varias resoluciones del Consejo de Seguridad que mina la seguridad regional e internacional”, dijo el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.


“Corea del Norte debe volver a formar parte de un diálogo creíble y pleno de contenido con la comunidad internacional”, añadió.

Una portavoz de la encargada de Política Exterior de la UE Federica Mogherini describió el lanzamiento como violación inaceptable de los compromisos internacionales de Corea del Norte. 
 
Japón, Corea del Sur y Estados Unidos solicitaron una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU para analizar el último lanzamiento de un misil balístico por parte de Corea del Norte.

Según fuentes diplomáticas, se está estudiando cuándo se celebrará el encuentro, que habitualmente en estos casos tiene lugar a puerta cerrada.

La cita podría tener lugar este miércoles, cuando el Consejo de Seguridad tiene ya prevista una sesión para discutir sobre el régimen de sanciones contra Pionyang.

“Puede ser una ocasión”, explicó a los periodistas el embajador italiano, Sebastiano Cardi, que este mes preside el órgano.

El representante de Japón ante la ONU, Koro Bessho, condenó el ensayo norcoreano y aseguró que se trata de una acción “muy preocupante”.

“Lo condenamos públicamente. Hemos dicho a los norcoreanos que criticamos su comportamiento”, dijo Bessho en la sede de Naciones Unidas.

El diplomático subrayó que el ensayo, el primero efectuado por Pionyang en más de 70 días, es algo “muy preocupante”.