Educación laica
Eso no es cierto, porque está comprobado que hasta ahora los mejores profesionales del país estudiaron en las escuelas normales y en la Universidad de San Carlos.
Para quienes no les interesa que nuestros hijos e hijas tengan nociones de libertad y rebeldía, la Biblia los va a enderezar, pero si eso no es posible, entonces habrá que recurrir a policías y militares, para que los domestiquen y los pongan al cinto. Por eso es que también a nivel nacional están comenzando a llegar quienes antes eran los de asuntos civiles del Ejército y de la oficina de conflictividad de la Policía Nacional, a dar charlas sobre violencia, feminismo, machismo y derechos humanos a las escuelas y colegios, además motivan a los jóvenes a unirse al grupo de reservas militares, como si nos estuviéramos preparando para la guerra y no para la vida.
Con esto volvemos a la Edad Media, cuando la educación era controlada por la religión y quien no se sometía a esos designios divinos, vendría por ellos el poder militar. Estamos retrocediendo a la historia de los años del anticomunismo en Guatemala, cuando religión, políticos y militares se unieron para desbaratar lo poco que habían construido los gobiernos de la revolución, en términos educativos.
Pedir que se enseñe la Biblia en los centros educativos o que vayan a dictar conferencias sobre violencia los militares y policías, nos hace recordar los años de las dictaduras, en donde fue obligatorio hacer el saludo a cualquier oficial militar que se encontraba en la calle. Por eso llevar a la escuela un culto religioso, igual que llevarlos a las instalaciones militares, no promueve principios y valores, sino miedo a ser humano y a la libertad.
Si las familias guatemaltecas no reparan en esto, volveremos a tener una educación netamente religiosa o militar, que promueve no seres pensantes, sino manipulados y fanáticos y por lo consiguiente la democracia y lo poco de libertad que tenemos estaría mucho más en peligro. Religión se enseña en las iglesias; lo militar, en las instalaciones militares.