EDITORIAL
Nuevos golpes a la impunidad política
Dentro de la tarea que se ha impuesto la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (Cicig) para señalar públicamente acciones ilegales e incorrectas, ayer destacaron los señalamientos relacionados con los medios de comunicación masiva. Aunque no es nada nuevo, al ser conocido desde hace años, no le resta importancia a lo manifestado por el comisionado Iván Velásquez, porque lo oficializa a nombre de una entidad internacional cuya importancia cada vez está más fuera de duda.
Los señalamientos se refieren al monopolio de la televisión abierta, así como a algunas cadenas de radiodifusoras, y además indican que el financiamiento indirecto a la política tiene entre sus características “la concentración de medios con cobertura nacional, la dispersión de los medios locales de comunicación y el establecimiento de conglomerados de medios en torno a líderes políticos”, así como la publicación de falsos noticieros para divulgar propaganda política disfrazada de notas periodísticas en la radio y la televisión.
El informe de la Cicig señala específicamente a los cuatro medios de la televisión abierta, y se refiere de manera general a las cadenas radiales, las empresas de cable y la prensa escrita, en un tema que despierta el interés de los ciudadanos, conscientes de la importancia de que la labor periodística y comercial de los medios informativos sea realizada, por el bien del país, sin acuerdos tras bambalinas para tergiversar la labor informativa como contrapeso a las acciones, especialmente, de quienes ejercen cargos públicos.
Creemos necesario comentar lo afirmado por el comisionado Iván Velásquez. El señalamiento más fuerte se refiere a los canales abiertos, porque afirma que ese monopolio ofrece a los partidos y candidatos tiempo gratuito, precios especiales, crédito, cobertura informativa y amenaza de veto a esta; proporcionalmente a las posiciones en las encuestas incluye opciones minoritarias y busca influencia y posiciones claves en el Ejecutivo, así como en el Legislativo, con lo cual se refiere obviamente a la presidencia de este organismo, ejercida ahora por Luis Rabbé, relacionado con la televisión abierta desde hace varios lustros.
Debe indicarse que el monopolio de la televisión fue el resultado de que las personas del sector privado que poseían canales no pudieron o no tenían capacidad ni voluntad de entender la importancia de que este medio no fuera controlado por una persona, que vive fuera del país, a donde desde hace varias etapas electorales se acercan los políticos a negociar los acuerdos que luego explican acciones como la falta de información y de transmisiones directas de las manifestaciones en contra del Gobierno, en un ejemplo de lo ocurrido este año.
Los medios informativos necesitan mantener independencia para cumplir con su papel en la sociedad. El retorcimiento de este, debido a sus consecuencias, debe ser estudiado, en especial cuando hay situaciones de conmoción política como la que afronta ahora el país. Al igual que lo referente a la actitud de políticos, financistas y funcionarios, se trata de acciones que llevan a beneficiar a la ciudadanía por permitirle conocer entretelones del ejercicio público.