Las personas no tardaron en descargarla y hasta la fecha tres millones de salvadoreños ya han recibido el beneficio, y para ello el Gobierno habría desembolsado US$90 millones.
Sin embargo, las dudas aún persisten en el ambiente tanto por el lado del usuario como del comercial, y se ven empañadas por temas de transparencia relacionadas con el manejo de datos de la billetera digital y los fondos estatales, sumado a denuncias de supuestas suplantaciones de identidades para cobrar el bono.
Clynton Roberto López, director de Economía de la Facultad de Ciencias Económicas, de la Universidad Francisco Marroquín, (UFM) comentó que la implementación del bitcóin como moneda de curso forzoso en El Salvador es un “experimento, y así como puede funcionar, puede fracasar”.
El economista analizó que el bitcóin enfrenta un problema importante y es que aún no es a nivel mundial un medio de intercambio generalmente aceptado, sino más bien funciona como un activo especulativo.
Si más países siguen el ejemplo de China de prohibirlos, o hacerlos ilegales seguirán enfrentando desafíos importantes para ser monedas de intercambio generalizado, advirtió.
Experiencia en el uso comercial
López compartió que tuvo conocimiento de casos en los cuales los salvadoreños aceptan el bitcóin pero, los precios los indexan diariamente con el dólar porque los convierten inmediatamente a dólares por la poca confianza en la criptomoneda.
Lo anterior, genera una dificultad de estabilidad y complicaciones en las planeaciones de negocios por la volatilidad del bitcóin. “Es un experimento, hay que ver si funciona, o si el dólar seguirá funcionando de forma paralela en la economía como sucede en otros países”, resaltó el profesional.
Los salvadoreños tienen muy arraigado el uso del dólar, no por la dolarización necesariamente, sino porque buena cantidad de salvadoreños tienen más de tres décadas de mandar remesas en dicha divisa desde Estados Unidos, recordó López.
Además, la recomendación de cambio a dólares de los bitcoines es mejor hacerlo en plataformas establecidas y tener cuentas en el extranjero y en Guatemala, explicó López.
Restaurante y panadería San Martín
Luis Pedro Ibarra, gerente de País de la cadena de restaurantes y panadería San Martín en El Salvador relató que, a un mes de haber ingresado el bitcóin, había más preguntas que respuestas, pero existía una oportunidad de captar al consumidor que había descargado la billetera digital, y que representaba más $400 millones, “era una buena oportunidad”.
San Martín se anticipó a la entrada en vigencia de la criptomoneda y empezó acercamientos con la plataforma OpenNode Querina, quienes tienen experiencia en el tema y consiste en una aplicación que genera un código QR para poder hacer la transferencia hacia la cuenta de la empresa y automáticamente la traslada a dólares.
“Además de tecnología hubo capacitación a todas las personas de cara al cobro para orientar en este nuevo proceso de pago. Es así como empezamos desde el día uno aceptando bitcóin. Sin embargo, la aplicación Chivo Wallet presentó varias inconsistencias las cuales se fueron solventando en el transcurso del tiempo”, expresó Ibarra.
El gerente dijo que las dudas más frecuentes han sido cuando el cliente no logra procesar su transacción creyendo que el negocio es responsable. Sin embargo, le informamos al usuario que debe acercarse a los puntos de Chivo Wallet para solventar cualquier inconveniente o inconsistencia, puntualizó.
Agencias Way
Carlos Way, director comercial de Agencias Way, afirmó que la empresa de origen guatemalteco y que tiene sucursales en El Salvador han sido respetuosos de la ley y se encuentran en trámites para poder utilizar la aplicación autorizada por el gobierno llamada Chivo Wallet y aceptar bitcoines.
“El gobierno nos garantiza no sufrir pérdidas por fluctuación de moneda y lograr una transferencia inmediata a dólares de los pagos que recibamos por este medio. Esto nos da tranquilidad en el sentido que, si las cosas funcionan como el gobierno lo indica, la empresa no va a incurrir en riesgos cambiarios.”, dijo el gerente.
Way aseguró que, por el momento, no tienen planes de invertir en bitcoines, porque ese es otro giro de negocio en el que no participan como empresa.
Un aspecto relevante que compartió Way fue que han observado un acelerado interés por el manejo de monedas digitales en El Salvador, lo cual como cultura económica puede ser útil para la población.
Industria de Metalurgia
Jacobo Alvarado presidente de la Gremial de Industrias de la Metalurgia adscrita a la Cámara de Industria de Guatemala (CIG), declaró que, si bien se estableció como moneda en curso en El Salvador, no están obligados a recibir el bitcóin.
Explicó, que en las transacciones de importaciones y exportaciones, no van a afectar, y para las relaciones de intercambio comercial la moneda que se seguirá manejando es el dólar.
“La mayoría de las empresas del sector metalurgia tienen operaciones en El Salvador con ventas locales y nos estamos preparando todavía”, enfatizó.
En todo caso, afirmó que el bitcóin se queda más como una billetera electrónica, por el momento, más que una moneda de transaccionalidad para poder comerciar, no obstante, las empresas se están preparando, para recibir pagos de esa manera si en algún caso un cliente llega a pagar así.
“Las empresas pueden recibir un bitcóin e inmediatamente trasladarlo al dólar, tendrá un costo y se puede perder competitividad, hay preocupación que generar incertidumbre por el manejo”, apuntó.
Afirmó que las empresas están analizando las disposiciones, y como sector se buscará como se pueden acoplar a esas nuevas disposiciones de ese tiempo, así como aprender a adaptarse.
Negocios grandes aceptan bitcoines
Ricardo Castaneda Ancheta, economista sénior y coordinador de país para El Salvador y Honduras del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi) refirió que la mayor parte de negocios grandes aceptan bitcóin, y a menor escala los pequeños.
Sin embargo, quienes han hecho sus transacciones a través de la Chivo han reportado problemas, como tardanza en la transferencia o en algunos casos incluso la perdida de los recursos de esas transacciones.
Castaneda advirtió que, en dado caso el uso se vuelva masivo, podría observarse un aumento generalizado de precios, incluyendo los de las tasas de interés.
En analista consideró que al principio, hubo una descarga acelerada de la billetera digital, pero ya se ha ido desacelerando. Sin embargo, el gobierno podría seguir incentivando su uso e incluso anunció que si el consumidor paga con esa billetera en algunas gasolineras tendrá un descuento.
“Esto también confirma que esto más que una medida de política pública parece una media propia del mercadeo”, señaló Castaneda.
