Satisfechos
La Paach es una danza maya de origen prehispánico que adquirió características del sincretismo al adoptar ritos de la religión católica después de la Conquista española, en 1492, y que se mantiene vigente a pesar de que durante siglos la misma fue practicada por los indígenas en la clandestinidad.
Vicente Miranda, de 78 años, uno de los cuatro parlamenteros del ritual de la Paach, y presidente del Comité Pro Madre Maíz, expresó: “Dimos consentimiento para que el Ministerio de Cultura presentara la candidatura ante la Unesco, con el deseo de que la tradición que nuestros ancestros practicaron por largos años, y nosotros venimos realizando, siga vigente en San Pedro Sacatepéquez”.
El ritual es practicado todo los años del 25 de julio a finales de noviembre, como agradecimiento a la madre tierra por la cosecha del maíz.
“Con esta noticia esperamos que la Unesco brinde un aporte económico y nos acompañe en las acciones necesarias para dar a conocer en su justa dimensión esta expresión de nuestra identidad”, expuso Esbi Rolando González, presidente de la Asociación Nan-Jal (Madre Mazorca), entidad que trabaja en el rescate del ritual desde 1985.
Armando Castañón, directivo de la Fraternidad Xecana, y autor del libro Los Misterios del Maíz, indicó que la institución que representa apoyó las acciones del Ministerio de Cultura para lograr la información e investigaciones necesarias para el documento que se presentó a la Unesco.