Escenario

Katy Perry se consagra como la reina de la noche en el megaconcierto de coronación en Windsor

Un gran concierto pop en honor de los monarcas frente al castillo de Windsor y decenas de miles de comidas vecinales celebraron el domingo en todo el Reino Unido la histórica coronación de Carlos III y la reina Camila.

Por primera vez, la Terraza Este del Castillo de Windsor albergó un espectacular concierto en vivo que también fue visto en más de 100 países alrededor del mundo. (Fotor Prensa Libre: AFP)

Por primera vez, la Terraza Este del Castillo de Windsor albergó un espectacular concierto en vivo que también fue visto en más de 100 países alrededor del mundo. (Fotor Prensa Libre: AFP)

Un gran concierto pop en honor de los monarcas frente al castillo de Windsor y decenas de miles de comidas vecinales celebraron el domingo en todo el Reino Unido la histórica coronación de Carlos III y la reina Camila.

Antes de caer la noche, los reyes se sumaron a 20 mil espectadores frente al escenario instalado en Windsor, pequeña localidad a unos 40 km de Londres, para un gran espectáculo presentado por Hugh Bonneville, actor de la serie “Downton Abbey”.

Organizado por la BBC, con un escenario con forma de Union Jack (la bandera del Reino Unido), el concierto estuvo presidido en el palco de honor por los reyes Carlos III y Camila, acompañados por el heredero de la Corona, el príncipes Guillermo, y otros miembros de la realeza.

Precisamente, Guillermo aportó el momento introspectivo al espectáculo, con un breve discurso en el que quiso agradecer a su padre “por 50 años de servicio”, además de recordar a su difunta abuela, Isabel II.  “Papá, estamos todos tan orgullosos de ti”, dijo el príncipe de Gales, mientras las cámaras mostraban al monarca junto a su mujer, la reina Camila, así como a la mujer de Guillermo, Catalina, y sus hijos mayores, Jorge y Carlota.

Citó a Isabel II al afirmar que “las coronaciones son una declaración de nuestras esperanzas para el futuro”, y se mostró convencido de que “está allá arriba, echándonos un ojo cariñoso. Y sería una madre muy orgullosa”.

Elton John, Adele, Ed Sheeran o Harry Styles fueron los grandes ausentes de la gala al no aceptar la invitación.

Impresionó en el concierto, toda vestida de dorado, la estadounidense Katy Perry, que colabora en obras benéficas con Carlos III, interpretó sus célebres Roar y Firework.

 

El veterano Lionel Richie arrancó incluso unos pasos de baile al monarca, de 74 años, con un “All Night Long” cargado de energía que puso a toda la familia real en pie.

Breves vídeo presentados por actores como Pierce Brosnan, Hugh Jackman o Joan Collins, recordaron durante el concierto datos biográficos sobre el rey como su afición por la artes, su amor de los animales o su formación como piloto.

“Puede ser mi copiloto cuando quiera”, afirmó Tom Cruise en una grabación desde su avión de la película Top Gun.

También aparecieron las marionetas de la cerdita Piggy y la rana Kermit, que hicieron reír a los nietos del monarca Jorge y Carlota, sentados juntos a sus padres, Guillermo y Catalina.

La “boy’s band” de Mánchester Take That cerró un concierto de poco más de hora y media.