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Brenda Zacnicté, hija de José Ernesto Monzón, mencionó a Prensa Libre en octubre pasado, que su padre había sostenido charlas con el intérprete mexicano para que grabara ambas canciones.
“En 1957, Pedro Infante le iba grabar un par de cancones a mi papá. Ya se habían reunido algunas veces, por eso es que hay una foto histórica de ellos juntos”, señaló en aquella ocasión.
“Serían dos canciones, un bolero titulado Otra vez, que el mismo Pedro Infante escogió. Una de las solicitudes era que él grabara Soy de Zacapa, porque era un corrido ranchero”, mencionó Brenda Zanicté.
Lamentablemente el proyecto no se concretó. Ella recuerda que un mes antes de entrar al estudio para poner sus voz a los temas de su padre, el ídolo mexicano falleció. Un accidente de aviación le arrebató la vida hace 60 años, el 15 de abril de 1957.
“Un mes antes de comenzar las grabaciones murió Pedro infante, pero las iba a cantar con el Mariachi Vargas de Tecalitlán que ya las tenía ensayadas”, refirió.
José Ernesto Monzón se dedicó a recoger aspectos cotidianos de los guatemaltecos y los plasmó en sus canciones, que se dice son más de 300 y se siguen descubriendo temas que escribió durante sus constantes viajes a la provincia.
“Zacapa es el departamento donde existe la gente más orgullosa de su tierra. Simplemente él recogió lo que la gente decía cuando les preguntaban de dónde eran: ‘Soy de Zacapa'”, dijo sobre el tema, uno de los más emblemáticos del legado musical del Cantor del paisaje.
Monzón e Infante nacieron en 1917, ambos tenían 39 años cuando se encontraron para grabar las canciones del guatemalteco.
Este 2017 se conmemora el centenario del nacimiento de estos dos grandes de la música.
