Según las conocedoras de perfumes y quienes trabajan en este sector industrial, el 60% de quienes llegan a la perfumería o a un almacén que cuente con este departamento son personas que ya tienen una marca en mente, pero el 40% restante desea cambiar de perfume, busca uno nuevo o está indeciso y necesita más asesoría, declara Cinthia Carrillo encargada de perfumería de Almacenes Siman, en Oakland Mall.

Cuando llega a la perfumería y desea cambiar o probar una nueva fragancia, las señoritas conocedoras del tema le formularán preguntas como las siguientes:

¿Qué fragancias ha utilizado?, para encontrar perfumes similares, o si al aplicárselo el aroma permanece varias horas o se volatiliza en poco tiempo. Esta última pregunta es para conocer su tipo de piel. Las pieles secas tienen un pH ácido, necesitan mayor humectación, por consiguiente al tener menos líquidos que una piel grasa, lo absorben con más rapidez.

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Lo contrario ocurre con quienes tienen piel grasa, el pH alcalino hace que los aromas se conserven por tiempo prolongado, argumenta María José Ramírez, experta en perfumes de almacenes Siman, con más de 12 años de experiencia.

Dónde empezó todo

De acuerdo a las evidencias, el origen del perfume inició en Mesopotamia en el 1200 a.C.  Tapputi Belatekallim, una mujer que trabajaba para el rey Tukulti Ninurta I creaba perfumes a partir de flores y plantas, con propósitos medicinales. Por otro lado, es conocida la importancia que los egipcios le daban al perfume, quienes los usaron en ceremonias religiosas. Posteriormente, los romanos le dieron un carácter comercial y abrieron tiendas para vender las fragancias.

Fue en el reinado de Felipe II, en Francia, cuando se ordenó la apertura de las primeras escuelas de perfumistas, cuyos alumnos después de 4 años de estudios se graduaban de maestros perfumistas.

De perfumes y eau de toilettes

Antes de entrar de lleno a hablar de perfumes y sus categorías debemos saber la diferencia entre terminología básica como: Eau de toilette, Eau de Parfum, Eau de Parfum intense y perfume.

De acuerdo a Marina Pirir de Estrada, Gerente de Perfumería Fetiche en Majadas, el Eau de toilette es el más ligero (no es perfume), le sigue el Eau de parfum con un poco más de fuerza, luego el Eau de Parfum Intense, pero el que tiene más esencias y combinaciones es el perfume per sé.

Los verdaderos conocedores son los perfumistas: denominados “nariz”  (nez, en francés) hay pocos en el mundo y son ellos quienes crean los perfumes, explica de Estrada.

Apasionados por los aromas pueden llegar a memorizar miles de olores y estos puedan evocar recuerdos de momentos importantes de nuestra vida.

“Las fragancias tienen memoria”, exclama María José Ramírez, algunos le harán recordar su niñez, otras su boda o la de algún hijo. De cualquier forma sonreirá al recordar gratos momentos de su vida, tan solo al haber utilizado su olfato en el momento oportuno.

El término “nariz” fue acuñado en Francia en el siglo XX, los perfumistas se distinguían por tener conocimientos sobre plantas, flores y química. Para que una nariz cree un perfume debe partir de una nota de salida, una nota corazón y una de base o de fondo.

La nota de salida, es lo primero que se huele en el perfume. La del corazón es la nota intermedia, determina si es floral, amaderado o dulce, aunque por lo general es floral, asegura Marina Pirir y finalmente está la nota de fondo,  que se caracteriza por ser intensa y fuerte, es la última que sentimos. Puede ser por ejemplo: pachuli, sándalo o cedro. Estas últimas son las que proporcionan la fijación al perfume.

¿Qué perfume va conmigo?

Al escoger un perfume o un eau de toilette, conviene que vaya acorde a su personalidad y estilo de vida; sin embargo, hay que tomar en cuenta que una mujer puede utilizar diferentes perfumes de acuerdo a la actividad que realice, los perfumes florales y frescos conviene aplicarlos durante el día y en la noche reservar los orientales y amaderados.

Guía para seleccionar un perfume