1. ¿QUÉ ES LA LEISHMANIASIS?
La leishmaniasis es causada por un parásito del género Leishmania, transmitido por la picadura de este. La enfermedad se presenta en tres formas: leishmaniasis visceral, que es mortal si no se trata. Se caracteriza por episodios irregulares de fiebre, pérdida de peso y anemia. Leishmaniasis cutánea es la forma más común y provoca úlceras en las zonas expuestas del cuerpo y deja cicatrices permanentes y discapacidades graves. Leishmaniasis mucocutánea conduce a la destrucción parcial o completa de las membranas mucosas de la nariz, la boca y la garganta. Entre los factores de riesgo están las malas condiciones de vivienda y las deficiencias de saneamiento de los hogares —por ejemplo, la ausencia de sistemas de gestión de residuos y alcantarillado abierto—, así como malnutrición.
Las dietas bajas en proteínas, hierro, vitamina A y cinc aumentan el riesgo de que la infección progrese.
2. ANOPHELES Y LA MALARIA
El paludismo o malaria es una enfermedad potencialmente mortal, causada por parásitos que se transmiten al ser humano por la picadura de mosquitos infectados, los Anopheles.
El paludismo es una enfermedad febril aguda. Los síntomas aparecen a los siete días o más —generalmente entre los 10 y los 15 días— de la picadura del mosquito. Los signos incluyen fiebre, dolor de cabeza, escalofríos y vómitos. Si no se trata en las primeras 24 horas, el paludismo puede agravarse. También se puede presentar anemia grave y sufrimiento respiratorio. Esta enfermedad es prevenible y curable. Gracias al aumento de las medidas de prevención y control la carga de la enfermedad se está reduciendo notablemente en muchos lugares. En el 2012, el paludismo causó cerca de 627 mil muertes, sobre todo en niños.
3. AEDES AEGYPTI PUEDE TRANSMITIR EL DENGUE
En las Américas, cerca de 106 millones de personas en 21 países viven en áreas en riesgo de padecer malaria o paludismo y casi toda la población de la región convive con el mosquito Aedes aegypti, capaz de transmitir los virus que causa dengue y fiebre amarilla.
El dengue causa fiebre, fuerte dolor de cabeza, dolor en la parte de atrás de los ojos, en las articulaciones y los músculos, y erupción en la piel. No hay vacuna o medicamento específico para tratar el dengue. El tratamiento incluye reposo, mucho líquido y medicinas paliativas. El dengue hemorrágico es una forma aguda de la enfermedad y puede ser letal.
La fiebre amarilla causa dolores de cabeza, musculares y articulares; fiebre, sofoco, inapetencia, vómito e ictericia. Después de aproximadamente cuatro días, a menudo los síntomas desaparecen brevemente. El término “amarilla” se debe a la ictericia que presentan los pacientes. La mayoría se recupera en esta etapa, pero algunos empeoran en 24 horas, presentando problemas en muchos órganos. Esto puede derivar en insuficiencia hepática, renal y cardiaca, trastornos hemorrágicos, convulsiones, delirio y latidos cardiacos irregulares. El tratamiento es sintomático y consiste en paliar los síntomas y mantener el bienestar del paciente. La vacuna es el método de prevención más importante.
4. EL EPROTOZOO TRYPANOSOMA CRUZI ES EL CAUSANTE DEL CHAGAS
Cuando el insecto conocido popularmente como chinche pica a las personas, generalmente en el rostro, deja excrementos infectados y es ahí cuando se desarrolla la infección conocida como enfermedad de chagas, que puede producirse al frotarse los ojos o la nariz, en la herida de la picadura o una cortadura. La enfermedad también se disemina a través de los alimentos contaminados, una transfusión de sangre, un órgano donado o de madre a hijo durante el embarazo.
Síntomas: fiebre, síntomas gripales, erupción cutánea y párpados inflamados. Estos suelen desaparecer espontáneamente. Sin embargo, si no se trata, la infección queda en el organismo y más adelante puede causar problemas intestinales y cardiacos serios.
La detección se hace a través de un examen físico y de sangre. También pueden ser necesarias otras pruebas, para determinar si la enfermedad ha afectado sus intestinos o corazón.
Las medicinas pueden matar el parásito, especialmente en etapas iniciales.
Fuente: medlineplus.com