A Caputo se le ocurrió la idea hace 21 años y luego se convirtió en una tradición navideña con la que recuerda a los automovilistas que deben obedecer los límites de velocidad y mantenerse alejados de los teléfonos celulares en las zonas escolares.
“Les damos a nuestros infractores una opción”, indicó en un comunicado el oficial, quien aclara que, en el marco de la temporada navideña, el duende solo se le aparece a aquellos que van unas pocas millas por hora por encima del límite de velocidad, y les da a elegir entre multa o cebolla.
Los más veloces, los infractores en exceso, están sujetos a una multa en toda regla por parte de las autoridades locales.
¡Y aparece el Grinch!
Caputo explicó que cuando un automóvil es detenido, los agentes uniformados verifican la matrícula del vehículo y la licencia de conducir. Si todo está en orden, le piden al automovilista que espere en el coche. Entonces es cuando aparece el Grinch para charlar con el conductor desprevenido y a menudo asustado.
“Hemos tenido momentos en los que la gente contempla cuáles son sus opciones y qué van a elegir”, dijo. “Puedo decirte que, si eligen la multa, probablemente los tendremos que sacar del auto para hacerles una prueba de sobriedad“, añadió.
A pesar del humor, Caputo recalca que hay un trasfondo serio en este inusual proyecto, como es promover la seguridad vial en zonas escolares.
El duende verde que personifica el agente policial se basa en el personaje de ficción creado por Theodor Seuss Geisel, al que da vida en el libro infantil de 1957 ‘¡Cómo El Grinch robó la Navidad!’, muy popular en Estados Unidos y que fue llevado al cine en 2018.