La familia ya había viajado una docena de veces en el pasado en avión y mantiene que el comportamiento del niño era tranquilo cuando la aerolínea tomó la decisión de no dejarles embarcar. Ahora denuncian que la única razón para no permitirles volar fue que viajaban en primera clase, en lugar de en clase económica.
“Bede tenía un asiento en primera clase y por alguna razón ellos no le querían allí. No era aceptable”, se quejó Joan a los medios
Un representante de la aerolínea quiso salir al paso de las acusaciones: “Pedir a la familia que esperase el siguiente vuelo fue una decisión que se tomó con mucho cuidado y en base al comportamiento del adolescente.
Nuestro equipo de atención al cliente y la tripulación trabajaron con la familia Vanderhorst para hacer que Bede se sintiera cómodo, desafortunadamente, la tripulación estimó que todavía seguía agitado y le pedimos a la familia que cogiese otro vuelo”, relata en una entrevista a Yahoo! Shine.
La familia fue trasladada a otro vuelo, de United Airlines esta vez, sin embargo tampoco pudieron viajar en primera clase. Ahora los Vanderhorst tienen intención de denunciar a American Airlines por discriminación y violación de la Ley de Discapacidad, que fue ampliada en 2009 para incluir normas para las aerolíneas