Nunca es tarde para aprender, como lo demuestra la mexicana Lupita Palacios, quien a sus 96 primaveras decidió recuperar el tiempo perdido y retomó sus estudios para aprender a leer y a escribir. Gracias a ello, obtuvo el mes pasado el título de secundaria que muestra con orgullo.
Confirmo que he leído la Política de privacidad de Prensa Libre y estoy de acuerdo con el uso de mis datos.