Durante las últimas décadas el cuidado del medio ambiente ha ganado más seguidores y, hoy en día, las empresas responsables se han unido a esta lucha, incluyendo dentro de sus planes de negocios acciones para realizar sus tareas de manera sostenible.

Actualmente son muchas las compañías que han tomado como base los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas para sus planes de negocios, y los que tratan temas del medio ambiente no solo cuidan el planeta, sino que generan ventajas económicas para las empresas.

Es por esto que está comprobado que promover la sostenibilidad ambiental sí puede ser rentable para una compañía. Dentro de los beneficios de acciones sostenibles que señala la ONU, para cumplir con el ODS 12:

Producción y Consumo Responsables, se encuentran:

• Optimización de los recursos e insumos necesarios para la operación de las organizaciones.
• Ahorro energético, ahorro hídrico, gestión de los residuos y disminución de gastos en logística.
• Ahorro en multas y/o sanciones por incumplir normas a favor del medio ambiente.
• Fortalece la imagen de la empresa, influyendo positivamente en su prestigio.
• Al incluir a los colaboradores en estas acciones, se refuerza su sentido de pertenencia, lo cual impacta en el ambiente laboral y en la retención del talento.

UN ENFOQUE HACIA LA “NATURALEZA POSITIVA”

Tras el conocimiento de las consecuencias del cambio climático y las acciones para contrarrestarlo, las empresas deben buscar un enfoque hacia la “naturaleza positiva”, como un eje prioritario para mejorar sus prácticas a mediano y largo plazo.

Cada vez existe mayor presión por parte de los consumidores por entender el origen de los bienes y servicios que eligen, así como por conocer las fuentes de energía para la producción o impacto social.

Está comprobado que hoy en día las personas basan su decisión de compra en factores como la responsabilidad de los negocios con el medio ambiente y la sociedad, incluyendo a sus colaboradores y cadenas de valor.

Según un estudio de Deloitte (2022), a partir de 17,025 encuestas realizadas en 15 países de Europa, el 80% de los encuestados compra más productos con empaques reutilizables; el 60% prefiere la compra de alimentos locales; y el 43% evita la compra de comida en línea, dada la cantidad de empaque utilizado en los alimentos. Por otra parte, el 43% de los consumidores elige marcas debido a su valor ambiental.

En consecuencia, las empresas que hasta la fecha no son social ni ambientalmente responsables, se están quedando atrás con un movimiento a nivel global que no se considera una “moda”, sino la nueva forma de hacer negocios.

Por lo tanto, más allá de que los consumidores se están imponiendo, la sociedad y las economías están en un proceso de transición donde la manera tradicional de hacer negocios requiere ser transformada hacia modelos económicos más responsables con los entornos ambientales y sociales, minimizando el consumo de recursos no renovables e innovando hacia empresas que generen huellas ambientales menores y potencien las capacidades de las comunidades aledañas.

De acuerdo con un estudio de Deloitte (2022), realizado en 15 países de Europa a más de 17,000 personas, el 80% de los encuestados compra más productos con empaques reutilizables; el 60% prefiere la compra de alimentos locales y el 43% elige marcas debido a su valor ambiental.

¿Cómo implementarla?

De acuerdo con el Circularity Gap Report publicado en 2022, en solo 50 años el uso global de materiales para la producción de productos casi se ha cuadruplicado, superando el crecimiento de la población. Estos son algunos ejemplos de acciones que buscan fomentar la sostenibilidad ambiental a nivel empresarial:

• PRODUCCIÓN PRO AMBIENTE

Compañías que muestran al público una producción libre de explotación natural y maltrato animal, desde la extracción de la materia prima, la creación de los productos y su distribución.

• MATERIALES REUTILIZABLES

Se trata de negocios que sostienen planes que incorporan material reciclable y reutilizable en sus productos, como empaquetamiento con material reciclado como envases de botellas, etiquetas de papel, cajas, entre otros.

• INCORPORACIÓN DE PLANTAS

Se trata de empresas que utilizan la flora como forma responsable en sus negocios, como viveros, fábricas de alimentos, floricultura y compañías que tienen planes de reforestación.