“Se reportan siete derrumbes en todo el trayecto, lo que dificulta el paso de toda clase de vehículos”, afirmó.
González añadió que la constante lluvia dificulta la labor de la maquinaria, porque la tierra está saturada de humedad, lo cual causa que a cada instante ocurran desprendimientos de tierra donde ya se ha despejado y en otros puntos.
En el kilómetro 314 también hay complicaciones para pasar, porque el asfalto está cubierto de lodo.
Según Covial, hay deslaves a lo largo de los 75 kilómetros entre la ciudad de Huhuetenango y la frontera con México.
Lugareños de La Mesilla indicaron que además de los derrumbes, ha habido cortes de electricidad.