El domingo último, Rodolfo López Girón, Rigoberto Aguilar, Roberto González y Expectación Marcos habrían sido secuestrados en la aldea Las Brisas, Mataquescuintla, Jalapa.
El grupo de líderes indígenas regresaba de la aldea El Volcancito, San Rafael Las Flores, Jalapa, donde participaron como observadores de una consulta comunitaria donde los habitantes votarían a favor o en contra de la minería en el lugar.
Según información de otros líderes, el grupo fue copado por un grupo de sujetos armados, quienes los habrían secuestrado.
Según relataron, López Girón y Aguilar habrían logrado escapar de sus captores en horas de la madrugada, en tanto que Marcos fue localizado muerto ayer en la mañana, atado de pies y manos.
Las primeras versiones señalan que el cadáver de Marcos presentaba golpes que le habrían causado la muerte, aunque fuentes oficiales afirmaron que el examen forense indica que Marcos habría muerto por asfixia por aspiración.
Roberto González, mayordomo de la comunidad y presidente del Parlamento Xinca, habría permanecido secuestrado durante el día, y anoche fue localizado ileso por las fuerzas de seguridad en un hotel de Chimaltenango, según confirmaron fuentes oficiales.
Tensión y protesta
Horas después del hallazgo del cadáver de Marcos, los pobladores de Santa María Xalapán se movilizaron a la cabecera de Jalapa para bloquear el ingreso y salida a esa ciudad, situación que seguía hasta el cierre de esta edición —23 horas—, y que causó molestia entre los habitantes de la cabecera.
Acuerdos
Entrada la tarde se instaló una mesa de diálogo de emergencia integrada por los líderes de las comunidades xincas; el obispo Álvaro Ramazzini; el viceministro de Seguridad, Edi Juárez, y el secretario general del Ministerio Público (MP), Mynor Melgar.
En el diálogo, según Ramazzini, se acordó que el MP intensificará las investigaciones para descubrir a los autores del crimen, dará protección a quienes estuvieron secuestrados y a sus familias; el acceso de unidades de la Policía Nacional Civil y del MP para investigar los sucesos y mejor coordinación entre autoridades y líderes para atender las demandas de la población xinca.
Añejo conflicto
Roberto González y Expectación Marcos son ampliamente conocidos y respetados por los habitantes de Santa María Xalapán porque son los líderes del movimiento que reclama como suyas unas 950 caballerías de tierra que abarcan gran parte del municipio de Jalapa.
La comunidad indígena reclama la legalidad de la cédula real otorgada por el rey de España en 1711, donde se les entregan las 950 caballerías a cambio de que los nativos de aquella época construyeran una iglesia y se convirtieran al catolicismo.
Esa petición fue parte de las demandas de los indígenas en la marcha campesina, que en marzo del 2012 recorrió desde Cobán, Alta Verapaz, hasta la capital.
Producto de los acuerdos, la Secretaría de Asuntos Agrarios (SAA) inició un diálogo en donde se han analizado mas de tres mil documentos relacionados al problema y se ha aceptado la legalidad de la Cédula Real, la cual ha sido analizada por diversos expertos.
Los pobladores de Santa María Xalapán viven en condiciones de pobreza y pobreza extrema, en parte porque el conflicto ha impedido una adecuada presencia del Estado; en la actualidad solo cuentan con un centro de salud y una escuela en precarias condiciones.
Descarta estado de Sitio en Jalapa
El ministro de Gobernación, Mauricio López Bonilla, descartó recurrir al estado de Sitio en la localidad. “Esa sería la forma más fácil y rápida para recuperar el control, pero muchas organizaciones utilizan eso para desprestigiar la imagen de Guatemala internacionalmente”, afirmó.
El ministro refirió que en ese territorio es “muy difícil” ingresar a realizar investigaciones. “Hasta a la autoridad le da temor, porque con retenciones se resuelve todo”, dijo.
Reconocido líder de pueblo xinca
Roberto González es el mayordomo de la comunidad indígena de Santa María Xalapán. Lidera el reclamo comunitario de 950 caballerías de terreno en Jalapa que aseguran que les fueron heredadas de la Corona española en 1711. La Secretaría de Asuntos Agrarios lo califica de un hombre de diálogo y accesible.
REACCIONES
Indignados por hechos
Alberto Brunori, representante de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, calificó los hechos de indignantes. “Nos preocupa tremendamente; pensábamos que no se iban a repetir esas situaciones. Entendemos que el MP ya ha tomado cartas en el asunto”, expuso el funcionario internacional.
Repudian criminalización
El Observatorio Nacional de los Pueblos Indígenas mostró su repudio por la criminalización de los derechos indígenas, “que luchan por una patria libre”.
Exige al Gobierno el esclarecimiento de la muerte de uno de los representantes de Santa María Xalapán y el retiro de las compañías mineras de territorios indígenas.
Preocupa secuestro
El procurador de los Derechos Humanos, Jorge de León Duque, lamentó la muerte de uno de los líderes comunitarios, la cual calificó de “indignante”.
Afirmó que está preocupado por la conflictividad, ya que los ánimos están caldeados. Incluso aseguró que la delegada de la PDH estuvo retenida durante algunos momentos.
Piden debido proceso
Por medio de un comunicado, la Embajada de Estados Unidos en el país lamentó el secuestro de los líderes indígenas xincas y la muerte de uno de ellos, e instó a la paz y a seguir el debido proceso, para que se haga justicia.
La referida embajada espera que el Ministerio Público efectúe una investigación completa e integral.