
JALAPA – La sospecha surgió luego que trabajadores de la municipalidad encontraron entre la basura pezuñas y colas de perro, por lo que se cree que los vendedores de comida destazaron a estos animales para dar de esta carne a los clientes, sin que estos supieran de donde provenía.
Los restos de perro fueron encontrados cerca del edificio del gimnasio municipal, área donde se instaló la feria, la cual se celebró del 7 al 16 de septiembre. Los vendedores de alimentos que estuvieron en la feria, quienes son ambulantes, ya se habían trasladado sus negocios a otros lugares.
La vecina María Luisa López Sánchez dijo que las autoridades de Salud deben de tener mejor control sobre los expendios de comida.
Mario Quintana, del Centro de Salud, indicó que ellos inspeccionan la calidad de los alimentos, pero no qué tipo de carne es. “Esto le corresponde al Ministerio de Agricultura”, expresó.