La víctima se estaba preparando para presentarse a su trabajo como supervisor de comercios informales en el mercado municipal de la cabecera; además, ocupaba el cargo de presidente del Consejo Comunitario de Desarrollo de la aldea Quebrada Seca.
En la escena del crimen fueron encontrados 14 casquillos calibre 9mm. El cuerpo tenia 9 heridas de bala en el pecho y cabeza