Quetzaltecos exigen acciones contra la violencia que los mantiene en zozobra

Extorsionistas mantienen en zozobra a propietarios de tiendas de barrio, comercios, viviendas y transporte público, en Quetzaltenango, pues algunos de ellos pagan  Q5 mil quincenales a los delincuentes.

Policías recolectan evidencias en el lugar donde fue atacado un piloto de un microbús, que de Xelajú cubre la ruta a Colomba. (Foto Prensa Libre: Carlos Ventura)
Policías recolectan evidencias en el lugar donde fue atacado un piloto de un microbús, que de Xelajú cubre la ruta a Colomba. (Foto Prensa Libre: Carlos Ventura)

El ataque armado perpetrado el viernes último contra Octavio Cardona, de 37 años, piloto de un microbús de la empresa Cholotío, que cubre la ruta de la cabecera a Colomba, evidencia que el fenómeno no se detiene y va en aumento.


Testigos del hecho y el conductor, que resultó con lesiones leves en el brazo izquierdo, comentaron que un individuo estacionó el vehículo en el que viajaba en el kilómetro 207.5, La Esperanza, descendió y disparó contra el piloto.

Norma Karina Morales, auxiliar fiscal del Ministerio Público, dijo que luego del ataque, el piloto condujo unos 400 metros y se estacionó.

En el lugar del hecho criminal, la Fiscalía recolectó cuatro casquillos.

Suben extorsiones

Empresarios de la ruta afectada indicaron que han sido extorsionados por un grupo de delincuentes. “Es difícil hablar del tema. Hoy —el viernes— teníamos que pagar, pero reaccionaron antes. Así no se puede seguir trabajando. Es mucho lo que piden y uno tiene que pagar piloto, ayudante y daños al vehículo por el pésimo estado de la ruta. Además, uno tiene que comer, junto con la familia, y así no se puede trabajar. No hay acciones contra ellos”, manifestó.

Transportistas que recorren de Xelajú a municipios del norte del departamento pagan  Q5 mil quincenales, pero en ocasiones los extorsionistas piden más o aparecen nuevos grupos. “Por ahora estamos bien con las cuotas que se dan a un solo grupo. El año pasado tuvimos que lidiar con dos, por eso entramos a paro porque no es justo pagar tanto y las autoridades solo llegan cuando hay ataques, pero la extorsión sigue. Es mucho dinero lo que se les da”, manifestó.

Al comercio

El sector comercial también ha sido blanco de extorsionistas, que han aumentado en los últimos días.

De acuerdo con Jorge García, presidente de la Cámara de Comercio filial Quetzaltenango, el fenómeno no ha disminuido y la seguridad es deficiente.

“No tenemos certeza en relación a cantidades que se paga, pero sí hemos notado que se ha incrementado la extorsión”, explicó.

Según el registro de denuncias policiales, a la fecha se han presentado 63 por extorsión, mientras que el año pasado fueron 140.

Exigen acciones

Integrantes de los consejos comunitarios de Desarrollo de las zonas 2 y 5 de la ciudad altense, se muestran alarmados por el aumento de asaltos y otros hechos delincuenciales.

“Desde hace dos semanas se incrementaron los hechos delictivos, los maleantes les roban los celulares a los peatones y el 3 de agosto asaltaron una casa de la 8ª avenida. Le informamos a la Policía para que nos apoyen”, informó uno de los integrantes de la Comisión de Seguridad Ciudadana, que por temor a represalias prefirió el anonimato.
 
Los vecinos solicitan a los jefes de la Comisaría 41 que coordinen más patrullajes en el lugar para evitar que siga ocurriendo ese tipo de hechos, que los mantienen en zozobra. 

Recuerdan el último hecho criminal, el viernes último, en la 3ª calle de la zona 2, en la tienda “Sammy”, donde el propietario de esta, Rolando Cuc, de 37 años, fue ultimado por asaltantes. 

Ese hecho fue repudiado por los vecinos. “Lamentamos que ocurra esto en nuestro sector, porque antes era muy tranquilo, exigimos seguridad”, dijo una residente que también omitió su nombre.

Otro hecho

Cerca de ese sector, el viernes último, dos mujeres fueron víctimas de agresión sexual en el cerro El Baúl, lo que causó alarma a los vecinos.

En el cerro se han reportado robos y abusos contra de corredores, quienes aprovechan el clima del lugar para ejercitarse.  

Patrick Vercouture, presidente del Comité de Autogestión Turística Departamental, dijo que el abandono del cerro El Baúl es evidente.

“El sector público no tiene la capacidad para brindar seguridad a los turistas. Repudiamos los hechos violentos que generan una imagen mala de la ciudad”, agregó Vercouture.

PNC pide que denuncien

Jorge Lara, comisario y jefe de la Policía Nacional Civil de Quetzaltenango, dijo que la incidencia de las extorsiones ha bajado en comparación con el año pasado, pero la falta de denuncia complica las pesquisas.

Sobre el ataque armado ocurrido ayer contra un piloto de microbús, dijo que el caso se investiga.