“No queremos que los disturbios se repitan, porque un grupo de gente sin control es capaz de destruir negocios, viviendas o incluso matar a personas inocentes que no piensan igual que ellos”, expuso un vecino.
Denis Cano, oficial segundo de la Policía Nacional Civil (PNC), dijo que para garantizar la seguridad contarán con 35 agentes de la Policía y cien miembros del Ejército.
Agregó que el objetivo del plan es evitar que haya incidentes.
Óscar Barrios, gobernador de San Marcos, indicó que se dispondrá de un contingente de antimotines por si ocurre algún incidente.