Algunos de los enfermos tienen que compartir cama, y están cerca de depósitos de basura.
Juliana Sánchez, quien comparte cama con Elisa Martínez, contó que tienen que comer a dos metros de donde están las bolsas de desperdicios, y ambas esperan ser operadas. “Lo bueno es que nos están atendiendo”, resaltó.
Kenia Juárez, quien ocupa una cama ubicada en un pasillo, expuso que es lamentable esa situación, aunque debe agradecer que la operaron, pues fue referida desde Malacatán, San Marcos. “Espero que me den de alta pronto, para ir a descansar a mi casa”, señaló.
El director del hospital, Emilio Velásquez, indicó que el alto número de pacientes se debe a que muchos son remitidos de Jutiapa, Jalapa, Izabal, Chiquimula, Zacapa, entre otras comunidades. “Hay sobrepoblación, pero es porque no se le niega atención a nadie”, manifestó.
En la sección de Pediatría, que tiene capacidad para 18 pacientes, ayer había 54; en la de cirugía, que tiene 27 camas, se atendían a 39 personas, mientras que en la de maternidad el promedio de casos es de 25, pero había 50 mujeres esperando dar a luz.
Velásquez agregó que tiene 88 por ciento de abastecimiento de medicamentos y que únicamente hay problemas con una caldera, pero ya está siendo reparada.