Marcos Tambriz, uno de los vecinos que se negó a ser trasladado, dijo que tras el paso del invierno de este año, las cosas se complicaron más en la antigua Santa Catarina.
“Pase lo que pase, no vamos a salir de este lugar. Tengo 77 años de vivir aquí, y si Dios así lo permite, aquí voy a morir”, afirmó Tambriz.
Agregó que en varias ocasiones las autoridades han tratado de convencerlos de salir, pero lo que les ofrecen no les convence.
“Nos han dicho que nos dan una casa en un lugar seguro, pero no nos vamos, porque la casa que nos dan es muy pequeña. Tengo una familia muy numerosa y no vamos a caber en un cuarto que ellos llaman casa”, puntualizó.
Sebastián Xoquic, residente cercano al lugar, dijo que recientemente visitó esa localidad. “Al entrar a la iglesia se ven las paredes rajadas, y lo que llama la atención es que el lugar en donde estaba la imagen de la Virgen de Santa Catalina está estable, en buenas condiciones”, señaló.