
La decisión judicial se conoció el miércoles en el marco de un juicio contra la mafia, considerado el más grande de su tipo en el norte de Italia y en el que 120 personas fueron declaradas culpables.
Los cargos de que Iaquinta presuntamente estaba relacionado con la organización criminal fueron desestimados por el juez.
Sin embargo, su padre, Giuseppe, fue declarado culpable y fue sentenciado a 19 años de prisión.
“Ridículas, vergonzosas”
Tras el juicio, se determinó que Iaquinta le entregó ilegalmente dos armas a su padre, sobre quien pesaba, en el momento de la entrega, una prohibición de portar armas de fuego.
“Ridículas, vergonzosas”, gritaron Iaquinta y su padre cuando leyeron las sentencias.
El exfutbolista de la selección italiana negó vehementemente habercometido delito alguno.
“Han arruinado mi vida simplemente porque vengo de Calabria”, gritó cuando salía del edificio de la corte, informó la agencia de noticias Reuters. Calabria es una región en el sur de Italia.
“No hemos hecho nada y no tenemos nada que ver con la 'Ndrangheta. Estoy sufriendo como un perro (…) y no he hecho nada”, agregó.
Bajo la ley italiana, a los imputados se les permite apelar dos veces antes de que una sentencia sea confirmada.
La red 'Ndrangheta tiene alrededor de 6.000 miembros, de acuerdo con estimaciones del FBI, y es muy active en Calabria, una de las regiones más pobres de Italia.