Los privilegiados

La gimnasta Ana Sofía Gómez, el marchista Érick Barrondo, el badmintonista Kevin Cordón y los tiradores Jean Pierre Brol y Sergio Sánchez, ya saben qué se siente estar en lo más alto del podio —Guadalajara 2011—, y han esperado cuatro años para volver a tener esa oportunidad de saborear las mieles del triunfo.

Las madrugadas, los entrenamientos fuertes y estar mucho tiempo alejados de su familia, son sacrificios a los que un atleta de alto rendimiento debe enfrentar, pero al final la recompensa de conseguir una presea panamericana es gratificante.

El cierre de Guadalajara fue el inicio del trayecto que deberían recorrer estos atletas para poder ganar experiencia y obtener mejores habilidades para asegurar un nuevo cetro en este tipo de competencias.

Los cinco tuvieron participación en los Juegos Olímpicos de Londres, pero solo Barrondo pudo conseguir la tan anhelada y primera medalla para Guatemala —plata en marcha 20 kilómetros—; los demás dieron su mayor esfuerzo, pero no pudieron ante potencias mundiales.

El 2013 fue un golpe duro a la carrera de Cordón, quien por una lesión de la rodilla —rotura de ligamentos, tendón y meniscos— se alejó un año. Sin embargo, el deseo de regresar a la cancha y volver a brillar lo llevó a tener una evolución rápida y demostrar en el 2014 su capacidad de juego para alcanzar el oro centroamericano y del caribe en Veracruz.

Varios torneos internacionales han servido de preparación para Cordón, quien no solo ha recuperado su nivel de juego, sino también la confianza en sí mismo para dejar huella nuevamente en la cancha.

Ahora, el zurdo tendrá su tercera participación en Panamericanos y demuestra la energía y las ganas de llevarse su tercera medalla —plata en Río 2007 y oro en Guadalajara 2011—.

Sed de triunfo

Para Sofía, el comienzo del ciclo olímpico fue el esperado, tras haber participado en los Centroamericanos de San José, Costa Rica, en los que fue la reina de la gimnasia con tres oros, dos platas y un bronce.

A pesar de no poder conseguir el metal dorado en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Veracruz 2014 —plata en viga—, Gómez llega con mucha más experiencia que la del 2011; además, con la consigna de revalidar el título en su especialidad favorita —viga— y superar las dos medallas ganadas en Guadalajara.

La atleta guatemalteca más destacada en gimnasia tendrá su segunda participación en este tipo de eventos, con el objetivo de alcanzar la clasificación para los Juegos Olímpicos de Río 2016.

Sofi y su entrenador, Adrián Boboc, se prepararon en un campamento en Oakville, Canadá, donde cumplieron semanas arduas de entrenamiento y adaptación para llegar al cien por cien a las justas regionales.

Con un gran legado en el tiro deportivo, el más experimentado de la delegación, Sergio Sánchez, prepara su mejor disparo en sus octavas justas panamericanas.

Con 45 años, Sánchez ha demostrado tener la mira afinada en la modalidad de pistola libre 50 metros —su especialidad—, en la que quiere defender el título conseguido hace cuatro años.

Sánchez, quien empezó el ciclo olímpico en 1987, en los Panamericanos de Indianápolis, pero en la disciplina de pentatlón moderno, está a punto de iniciar una nueva aventura y confía en poder revalidar el cetro. Además, el atleta participará en la modalidad de tiro rápido 25 metros, una de las pruebas en la que ha demostrado ciertas debilidades, pero sin dejar de luchar hasta el final por la presea.

Los cuatro bronces por equipos ganados en Veracruz no le quitan la ilusión a Sánchez, para llegar con mejor decisión a Canadá.

Ante el poco fogueo para estos juegos, Sánchez buscará tener buen roce para llegar en su mejor nivel a sus quintos Juegos Olímpicos —Río de Janeiro 2016—.

Proveniente de una familia de tiradores, el menor de los Brol Cárdenas, Jean Pierre, es otro de los campeones panamericanos que llega con la ilusión de subirse a la cima del podio de Toronto.

El amor por las armas empezó gracias a su padre, Fernando, quien le enseño la pasión por este deporte y lo llevó a destacar en los mejores eventos dentro del ciclo olímpico y fuera del mismo.

La especialidad del foso olímpico corre por las venas de Jean Pierre, quien en el 2002 se dedicó de lleno a derribar los platos en la búsqueda de medallas.

Ahora, con 14 años de experiencia en el deporte, el menor de la dinastía Brol será uno de las atletas fuertes para que Guatemala sume un metal dorado.

El oro ganado en los C.A y del Caribe será la carta de presentación para Jean Pierre, que necesita revalidar el título para ester presente el próximo año en los Juegos de Río.

Esfuerzo constante

Como un novato en Guadalajara así fue como describieron a Érick Barrondo, quien dio muestra de su potencial al llegar sin problemas en primer lugar a la meta en su debut del ciclo olímpico.

Ese día fue el despegue de su carrera exitosa como marchista, ya que el destino tenía preparado más triunfos para el originario de San Cristóbal Verapaz, Alta Verapaz.

Con mucha humildad, Barrondo no se amilanó ante los atletas fuertes en la disciplina y empezó a escribir su propia historia.

En Londres, Barrondo demostró que no importa ser nuevo en este deporte, sino aplicar de la mejor manera la técnica para brillar.

Los Juegos Olímpicos del 2012 significaron el capítulo más glorioso para el país, tras la primera medalla en este evento.

A lo largo de estos cuatro años, el marchista ha demostrado disciplina, esfuerzo y sacrificio, lo que lo lleva a ser el centro de atención para estos Juegos, con la confianza de dejar nuevamente su huella y ser parte del medallero.