China propuso en 2013 un proyecto que el presidente Xi Jinping bautizó como “Nueva Ruta de la Seda” y que se compone de dos iniciativas, una marítima y otra terrestre, que ahora empieza sus operaciones con la creación de este fondo.
Mediante la construcción de autopistas, redes de telecomunicaciones, ferrocarriles y puertos, Pekín quiere relanzar su posición como centro del comercio continental e incrementar sus relaciones económicas con frica y Europa.
El fondo para la “Nueva Ruta de la Seda” tiene como objetivo captar oportunidades de inversión y proporcionar servicios financieros durante los avances de las iniciativas marítima y terrestre que incluye ese proyecto, según dijo el banco central chino.
Por el momento, la empresa tiene previsto invertir en infraestructuras, obtención de recursos y proyectos de cooperación industrial y financiera.