Los paros se han secundado sin que se produjeran retrasos o cancelaciones en el espacio aéreo y los aeropuertos españoles en ninguna de las cuatro jornadas de protesta, y se han cumplido los servicios mínimos fijados por el Ministerio de Fomento.
Enaire preveía un total de 22 mil 200 movimientos en el espacio aéreo español en el conjunto de los cuatro días de huelga, de los que 5 mil 300 se correspondían con los paros -2 mil 800 con el turno de la mañana y 2 mil 500 con el de la tarde- y, por tanto eran susceptibles a verse afectados.
Sin embargo, el tráfico aéreo y la actividad aeroportuaria en España no han sufrido alteración alguna por esta huelga, lo que el sindicato explica por unos servicios mínimos “abusivos” y que suponen “la vulneración del legítimo derecho a la huelga de los controladores”.
Fomento los fijó en un 70%, pero USCA denuncia que, en realidad, en primeras jornadas se respetó el derecho de huelga exclusivamente de los controladores que no desarrollaban actividades directamente operativas, ya que para los que sí lo hacían, los servicios mínimos fueron del 99 por ciento.