Ayer, la cotización de referencia en ese punto fronterizo se mantenía, lo cual quiere decir que hay abaratamiento de la moneda mexicana respecto del quetzal.
El fenómeno se acentúo en los últimos 15 días, situación que obligó a las autoridades del Banco de México a intervenir el mercado cambiario, a fin de evitar una caída pronunciada de la moneda en relación con el dólar.
En febrero último, por cada dólar se entregaban 14 pesos, pero en cuestión de semanas se depreció la moneda mexicana y ahora la referencia es de 15.42 pesos.
Oportunidad
Hugo Aroldo Díaz, comerciante de Retalhuleu, llegó ayer a Tecún Umán para comprar productos mexicanos que luego revende en el mercado de esa cabecera.
Díaz refirió que compró un lote de toneles plásticos, en Hidalgo, Chiapas, a un costo de 120 pesos por unidad, lo cual, al hacer la conversión a moneda local, equivale a Q60, y su precio de venta al público es de Q100.
Eso significa que, por la devaluación, obtendrá una ganancia del 66%.
Fidelia Juárez, ama de casa de Coatepeque, Quetzaltenango, dijo que llegó a Tecún Umán para abastecerse de productos de la canasta básica, ya que, por el tipo de cambio, le favorecen los precios y eso presenta ahorro familiar.
En su canasta, comentó, adquirió productos alimenticios como huevos, aceite, maíz, frijol, sopas instantáneas, leche en polvo, cereales, jugos y bebidas gaseosas, además de enseres de uso doméstico como champú, jabón para ropa y tocador, papel higiénico y desinfectantes.
Algunos consumidores incluso adquieren aparatos de línea blanca como refrigeradoras, estufas y lavatrastos, y electrónicos como televisores, computadoras y componentes que se ofertan sobre el río Suchiate, donde la tasación es favorable para el comprador del lado guatemalteco.
Algunos vendedores que ingresan productos de contrabando han optado por equilibrar sus precios, debido a la volatilidad del peso.
La aduana de Tecún Umán de la Superintedencia de Administración Tributaria reportó en enero último un recaudo de Q94.2 millones por IVA importaciones.